Cohete chino se desintegró y cayó sobre el océano Índico
Los restos de la nave reentraron en la atmósfera terrestre a las 02:24 de la madrugada de este domingo y cayeron al sur de la India
"Según la supervisión y el análisis, a las 10H24 (02H24 GMT) del 9 de mayo de 2021 la primera etapa del cohete portador Larga Marcha 5B ha vuelto a entrar en la atmósfera", informó la Agencia Espacial de vuelos tripulados de China en un comunicado, proporcionando las coordenadas de un punto situado en el Océano Índico cerca de las Maldivas, reseñó AFP.
La mayor parte de este segmento se desintegró y quedó destruida al entrar en la atmósfera, precisó.
El Comando Espacial estadounidense indicó en un comunicado que el cohete "entró sobre la península Arábiga a alrededor de las 02H15 GMT del domingo".
"No se sabe si los restos han caído en tierra o en agua", agregó.
#USSPACECOM can confirm Chinese #LongMarch5B re-entered over the Arabian Peninsula at approximately 10:15 pm EDT on May 8. It is unknown if the debris impacted land or water. https://t.co/4Ol9Sa2iJo
— U.S. Space Command (@US_SpaceCom) May 9, 2021
Space-Track, la red de vigilancia espacial de Estados Unidos, basándose en datos militares estadounidenses, también confirmó la entrada en la atmósfera.
"Todos los que siguen el regreso de #LargaMarcha5B pueden relajarse. El cohete ha caído", tuiteó Space Track.
Everyone else following the #LongMarch5B re-entry can relax. The rocket is down. You can see all relevant information and updates here on Twitter/Facebook, so there is no need to keep visiting the space-track dot org website.
— Space-Track (@SpaceTrackOrg) May 9, 2021
La caída del segmento corresponde a las previsiones de algunos expertos que decían que había muchas probabilidades de que cayera en el mar porque el planeta está formado por un 70% de agua.
Pero la vuelta descontrolada de un objeto de este tamaño generó preocupación sobre posibles daños y víctimas, a pesar de la escasa probabilidad.
EEUU señala imprudencia
El secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, aseguró esta semana que su país no tenía ninguna intención de destruir el cohete.
Sin embargo, Austin insinuó que China no planificó con suficiente cuidado su lanzamiento.
En 2020, desechos de otro cohete Larga Marcha se estrellaron sobre aldeas de Costa de Marfil, provocando daños, pero sin dejar heridos.
El laboratorio espacial Tiangong-1 se desintegró al reingresar a la atmósfera en 2018, dos años después de dejar de funcionar, aunque las autoridades chinas negaron haber perdido el control de la nave.
Para evitar que se repita esta situación, los expertos han recomendado un rediseño del cohete Larga Marcha 5B, que carece de la capacidad de controlar su descenso desde la órbita.
"Una entrada (en la atmósfera) sobre el océano siempre ha sido estadísticamente lo más probable", tuiteó Jonathan McDowell, un astrónomo de Harvard.
"Parece que China ha ganado su apuesta (salvo que tengamos noticias de partes caídas en Maldivas). Pero aún así fue imprudente", dijo.
"El hecho de que una tonelada de trozos metálicos caiga sobre la Tierra a cientos de km/h no es una buena práctica, y China debería revisar el diseño de las misiones Larga Marcha 5B para evitar esto", agregó.
China ha invertido desde hace varias décadas miles de millones de dólares en su programa espacial.
El país asiático puso en órbita el 29 de abril el primer módulo de su estación espacial, gracias al cohete portador Larga Marcha 5B, el más potente e imponente lanzador chino.
El gigante asiático envió a su primer astronauta al espacio en 2003. Una sonda china se posó en el lado oculto de la Luna en 2019, una primicia mundial.
El año pasado, trajo muestras de la Luna y terminó Beidu, su sistema de navegación por satélite (competidor del GPS estadounidense).
Y en las próximas semanas, China prevé posar un pequeño robot con ruedas en Marte. Además, la agencia espacial china anunció su intención de construir una base lunar con Rusia.