Berlín.- El conflicto político que Cataluña vive desde hace años se hizo más visible que nunca en el corazón político de Alemania y en uno de los grandes centros de influencia de la Unión Europea (UE), cuando dos actores enfrentados pujaron por atraer la atención de la opinión pública alemana. 

El partido soberanista del expresidente catalán Carles Puigdemont, Junts per Catalunya (JxCat), y Sociedad Civil Catalana (SCC), plataforma civil contraria a la independencia de Cataluña, llegaron a Berlín con mensajes diametralmente opuestos, citó DPA.

La formación de Carles Puigdemont insistió en que estudia cómo investirlo presidente de la comunidad autónoma, al tiempo que hará todo lo que esté en su mano para evitar la celebración de nuevas elecciones como solución al laberinto político en el que se encuentra Cataluña. 

Eduard Pujol, portavoz parlamentario adjunto de JxCat, aseguró que su partido es el primero que quiere tener un gobierno, pero también que se ha ganado "el derecho de gestionar los tiempos", porque hasta ahora su estrategia ha ido dando "frutos". Así lo dijo al término de un encuentro celebrado en un hotel del oeste de Berlín con 30 de los 34 diputados del grupo parlamentario de JxCat, entre ellos Puigdemont.  

"Tenemos la posibilidad de la candidatura de Carles Puigdemont, porque de hecho sigue siendo el presidente de Cataluña y la legitimidad del 'president' es absoluta, el país lo reconoce como presidente y, por tanto, tenemos que encontrar el mecanismo para llevarlo al Parlamento", declaró Pujol tras el encuentro. 

Pese a defender la candidatura del ex presidente del gobierno regional, el portavoz de JxCat tampoco quiso descartar la investidura de Jordi Turull, ex consejero del Gobierno catalán, ni la de Jordi Sànchez, ex presidente de la entidad civil independentista Asamblea Nacional Catalana (ANC), ambas bloqueadas por el Tribunal Supremo español. Turull y Sànchez están actualmente en prisión preventiva.  

"Sorprende que el independentismo no haya interiorizado la realidad catalana y que el señor Puigdemont ya no es presidente, que hubo unas elecciones tras las cuales se debe conformar un gobierno que debe gobernar dentro de la ley y para todos los catalanes", dijo a dpa José Rosiñol, fundador y presidente de SCC. "Exijo que haya un gobierno pero que respete el principio de representatividad, es decir, que no sólo gobierne para los independentistas". 

Representantes de la plataforma cívica contraria a la independencia y defensora de la unidad de España acudieron por primera vez a Berlín para mantener una serie de reuniones privadas con fundaciones, periodistas y representantes políticos. El objetivo fundamental de su viaje fue combatir la narrativa del independentismo en Alemania.  

En un primer momento, SCC anunció una reunión con la Fundación Konrad Adenauer, dependiente de la conservadora Unión Cristianodemócrata (CDU) de la canciller Angela Merkel, para posteriormente desmentirla. "No hemos tenido ninguna reunión con esa fundación, fue un error nuestro", aseguró Rosiñol.  

El presidente de SCC sí confirmó que su organización establecerá una "estructura permanente de voluntarios en Alemania" para hacer visible la pluralidad de la sociedad catalana y para enfrentar lo que considera la "propaganda" del soberanismo catalán. 

Desde hace casi un mes, la actualidad política de Cataluña se ha trasladado a Alemania, país en el que el Pugdemont fue arrestado el pasado 25 de marzo por las autoridades alemanas cuando regresaba por carretera de Finlandia a Bruselas. 

Puigdemont fue detenido en virtud de una orden europea de arresto emitida por la Justicia española. Un tribunal alemán decidió hace dos semanas descartar el delito de rebelión en su caso y, tras 12 días en la prisión de Neumünster, poner en libertad al político catalán a cambio de una fianza de 75.000 euros. 

El ex presidente del Gobierno catalán, destituido por el Ejecutivo central de Madrid en octubre por encabezar el proceso independentista, se encuentra en Berlín a la espera de que la Justicia alemana decida si lo entrega o no a España, donde está procesado por delitos de rebelión y malversación de fondos en relación con el proceso separatista. 

Mientras sigue la espera de una resolución de la Justicia alemana sobre la extradición de Puigdemont, el reloj sigue avanzando para la política catalana: si hasta el próximo día 22 de mayo no hay nuevo gobierno autonómico, y tal y como marca la ley electoral catalana, la dividida región se vería abocada a nuevas elecciones.