Academia Sueca acude a asesores externos para resolver su crisis
Este año fue suspendida la entrega del Premio Nobel de Literatura por “falta de confianza”, el 2018 se usará para realizar una reestructuración y el próximo años se entregarán dos premios
Copenhague.- La Academia Sueca informó este jueves que ha reclutado a expertos externos para superar la crisis provocada por el escándalo de filtraciones y supuestos abusos sexuales que ha provocado la salida de varios miembros y el aplazamiento de la concesión del Nobel de Literatura de este año.
El grupo de expertos incluye a entre 6 y 8 personas con competencia jurídica, en resolución de conflictos, organización y comunicación que trabajan desde hace un mes en colaboración con los académicos en cuestiones vinculadas con la parcialidad, las renuncias de miembros y la confidencialidad.
"Desde mediados de abril se ha puesto en marcha un trabajo de modernización y reformas amplio y a largo plazo, impulsado por los miembros activos en diálogo con el máximo protector de la Academia, el rey Carlos XVI Gustavo; la Fundación Nobel y asesores externos", señaló en un comunicado su secretario provisional, Anders Olsson.
Olsson recordó que se han reformado los estatutos para permitir la renuncia real de los miembros y su sustitución por otros, que el informe contratado a una firma de abogados ha sido entregado a las autoridades y el aplazamiento del Nobel, medidas que buscan recuperar la confianza y solucionar una situación "muy grave".
El escándalo estalló en noviembre, cuando un diario publicó la denuncia anónima de 18 mujeres por abusos y vejaciones contra el artista Jean-Claude Arnault, vinculado a la Academia a través de su club literario y esposo de una de sus miembros, Katarina Frostenson.
La Academia cortó el contacto con Arnault y encargó una auditoría sobre sus relaciones con la institución, pero desacuerdos internos provocaron renuncias, acusaciones y las salidas, entre otros, de la secretaria, Sara Danius, y de Frostenson.
El informe descarta que Arnault haya influido en decisiones sobre premios y ayudas, aunque el apoyo económico recibido incumple las reglas de imparcialidad al ser su esposa copropietaria de la sociedad que controla el club; y confirma que la confidencialidad sobre el ganador del Nobel fue violada en varias ocasiones.
Solo diez de los dieciocho miembros de la Academia participan actualmente del trabajo diario, aunque únicamente cuatro han presentado una renuncia escrita tras la entrada en vigor de la reforma de los estatutos.
"Nuestra esperanza es que los miembros que ahora no son activos pero que no han pedido la salida puedan reincorporarse a este importante trabajo", reiteró en el comunicado Olsson, quien hizo un llamamiento a la "reconciliación".
La Academia ha dado de plazo hasta septiembre a esos cuatro académicos, entre los que figuran Danius y Frostenson, para que confirmen por escrito si su renuncia es definitiva, y pretende elegir a sus sustitutos antes de finales de año.
Para justificar la decisión de aplazar el Nobel, por primera vez en siete décadas y que supone que en 2019 se otorgarán dos premios, la Academia Sueca apeló a la falta de confianza y a su propio debilitamiento tras la salida de miembros de dicha institución.