Caracas.- Una Comisión de Investigación de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) llegará al país el 9 de febrero para revisar las denuncias sobre presuntas violaciones de derechos laborales de los trabajadores.
La información fue suministrada por el presidente de Fedecámaras, Carlos Larrazábal, quien agregó que la Comisión Especial estará en Venezuela durante 10 días.
El líder gremial informó que se reunió en Ginebra, Suiza, con la citada comisión para tratar el tema de Venezuela, y entre los puntos evaluados destacó el reciente aumento del salario mínimo a Bs.S 18.000 decretado por el Ejecutivo, el cual según dijo no fue discutido con empleadores y sindicatos, tal como lo establece el convenio número 26 de la OIT.
Larrazábal aseguró que los constantes aumentos decretados por el Gobierno Nacional de forma inconsulta con el sector privado son violatorios de los convenios internacionales suscritos por Venezuela ante la OIT.
El dirigente empresarial dijo que “hay tres convenios que son de obligatorio cumplimiento, que si se cumplieran no estaríamos viviendo lo que estamos viviendo”.
“Uno es el convenio número 26, el cual dice que los aumentos de salario deben discutirse con todos los factores (empresas y trabajadores), y eso no sucede", agregó.
"Otro es el convenio 87 que prohíbe ataques a las empresas y sindicalistas, y eso se viola en Venezuela (…). Y el 144 que obliga a que las medidas económicas que se vayan a aplicar sean discutidas de forma tripartita, y eso no se ha hecho en los últimos 20 años”.
El titular de Fedecámaras puso en entredicho el conocimiento de los miembros del Gobierno en el tema económico, a quienes señaló de aumentar la liquidez de forma exorbitante, de subir el encaje legal y de asfixiar a los bancos, entre otras acciones gubernamentales.
A su juicio, el actual Gobierno no genera “la confianza mínima necesaria” requerida para lograr la recuperación económica del país.
Además, recordó Larrazábal que desde el sector empresarial han realizado múltiples propuestas, pero criticó que sus planteamientos jamás han sido escuchados por el Gobierno.
Indicó que “el sector empresarial ha trabajado fuertemente en un programa que se presentó en diferentes instancias y que requiere del apoyo internacional, sin el cual es difícil salir de la crisis”.
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