Hockenheim.- Después de partir en el puesto 14, el británico Lewis Hamilton ganó hoy con su Mercedes un alocado Gran Premio de Alemania de Fórmula 1 marcado por la lluvia y saltó a la cima del campeonato por el choque y abandono del alemán Sebastian Vettel.
Hamilton, con su cuarto triunfo de la temporada, lideró un inesperado 1-2 de Mercedes por delante de su compañero de equipo Valtteri Bottas, mientras que el también finlandés Kimi Raikkonen completó el podio con su Ferrari, que tenía la carrera casi asegurada hasta faltando 15 vueltas.
En ese momento, la lluvia hizo que Vettel se saliera de pista, lo que motivó un cambio drástico en la carrera, con Hamilton saltando del cuarto al primer puesto, para también modificar la cima del campeonato. Ahora, el británico lidera con 17 puntos de ventaja sobre el alemán.
"Por supuesto que es muy difícil conseguirlo desde esa posición y altamente improbable, pero siempre tienes que creer. Seguí presionando, seguí creyendo y sucedió", resaltó Hamilton, que largó en el puesto 14 por un problema hidráulico en la clasificación.
"El equipo hizo un trabajo fantástico hoy. Estoy muy agradecido. Para aquellos que no me conocían, ahora lo harán", añadió un desafiante Hamilton, que se lanzó hacia todos los integrantes de la escudería para festejar, antes de subir al podio y de que el temporal finalmente desatara una lluvia torrencial.
"Esto demuestra que lo importante es lo que sucede los domingos", remarcó Toto Wolff, jefe de Mercedes. "El sábado fue muy difícil para nosotros, pero hoy todo salió perfecto".
Detras de los tres líderes se encolumnaron el holandés Max Verstappen (Red Bull), el alemán Nico Hülkenberg (Renault), el francés Romain Grosjean (Haas) y los Force India del mexicano Sergio "Checo" Pérez y el francés Esteban Ocon.
Parecía que iba a ser una carrera monótona, pero sucedió todo lo contrario. Nada cambió en la largada, con los cuatro líderes manteniendo las posiciones y tomando pequeñas distancias entre sí. La única alternativa de la carrera era el avance de Hamilton, que no tardó en saltar desde el puesto 14 de salida hasta colocarse quinto antes de la vuelta 15.
También avanzaba desde atrás el australiano Daniel Ricciardo, pero cuando giraba sexto abandonó por problemas en su Red Bull.
El primero en mover fichas fue Raikkonen, que ingresó temprano a boxes y giró más rapido que el resto con los neumáticos nuevos. Por eso, cuando todos concretaron sus detenciones, el finlandés quedó por delante de Vettel y Hamilton, que extendió al máximo el uso de sus gomas a la espera de una lluvia salvadora.
La orden de equipo de Ferrari para Raikkonen llegó en la vuelta 39, por lo que Vettel saltó en ese momento a la punta, mientras que tres giros más tarde Hamilton tuvo que hacer su detención, con neumáticos que ya no respondían y sin que llegara el agua que esperaba.
Pero la lluvia finalmente apareció y dio un golpe de efecto llamativo, cuando Vettel ganaba con cierta comodidad.
"Las condiciones eran perfectas para poder hacer negocios", reconoció luego Hamilton. "Si llovía, sabía que tendría una buena oportunidad".
Mientras algunos pilotos ingresaban a boxes a cambiar los neumáticos, el alemán se salió de pista en el motódromo, en la curva número 13, una de las zonas más mojadas de la pista.
Sin control, el Ferrari pasó por encima de la cama de leca y se estrelló contra las barandas de protección. Por ese motivo, tuvo que abandonar, al tiempo que ingresó el auto de seguridad.
"Naturalmente fue mi error, no pude doblar en esa curva. Me di cuenta que se había terminado todo y estaba realmente decepcionado", se lamentó Vettel, que terminó golpeando el volante de su auto por haber perdido otra oportunidad de ganar un Gran Premio en casa, algo que nunca pudo conseguir. Igualmente, se mostró confiado en revertirlo la semana próxima en el Gran Premio de Hungría.
Bottas y Raikkonen fueron a los pits, lo que dejó a Hamilton inesperadamente adelante, con una pista mojada y con lluvia en algunos sectores y con sol y seca en otros.
Allí otra vez apareció la intuición de Hamilton, que evitó entrar a último momento a los pits pese al llamado del equipo, lo que le valió quedarse con la punta, por delante de su compañero y Raikkonen.
Cuando la carrera se relanzó, Bottas atacó la posición de Hamilton, pero todo volvió a sus cauces naturales cuando llegó la orden del equipo para que no hubiera cambio de posiciones. "Fue un error de comunicación", se limitó a decir Wolff sobre el sorpresivo ataque del finlandés.
"Como piloto estaba buscando ganar. Cuando Seb se estrelló, pensé que había una buena posibilidad", reconoció Bottas, que luego cumplió la orden de la escudería de no atacar a Hamilton. "Como equipo fue una carrera perfecta para nosotros".
Así, con amenaza de lluvia hasta el último segundo, llegó la bandera a cuadros para un exultante Hamilton, que lidera el campeonato con 188 puntos contra los 171 de Vettel. La semana próxima será un nuevo capítulo de la batalla con el GranñPremio de Hungría.
Siguenos en
Telegram,
Instagram,
Facebook y
Twitter
para recibir en directo todas nuestras actualizaciones