Barinas.- Sin tener cálculos exactos de las pérdidas arrojados por las inundaciones, 50 fincas, aproximadamente, de la parroquia Santa Inés de Barinas, han sufrido las consecuencias del aguacero registrado en las últimas horas.

Los productores de esta zona normalmente se preparan para la temporada de invierno, debido a la vulnerabilidad de sus terrenos a las inundaciones, porque los cauces no aguantan la cantidad de agua que arrastra gran cantidad de sedimentación.

El colapso de caños y quebradas en la zona de Santa Inés, mayormente es propiciado por desechos sólidos que recorren río abajo y se acumulan en pasos reducidos del cauce, que también afectan la estabilidad de los puentes.

La preocupación de los productores se debe a que son las primeras lluvias después de un fuerte verano, pero esta vez la tierra reseca no absorbió el agua desbordada de los cauces por lanalta cantidad que pasó a la sabana.