EL UNIVERSAL
Los habitantes del sector Nueva Barcelona, en el estado Anzoátegui, aseguran que desde hace más de un mes esperan que culminen la reparación de un colector caído. Los vecinos entrevistados por medios locales como El Tiempo manifestaron que los trabajos comenzaron en la carrera 33, luego se trasladaron a la 35, donde se inició una excavación en la tierra, desde la esquina cercana al Liceo Juan Manuel Cajigal hasta la entrada de las residencias Las Trinitarias B y C.

"Aquí estamos con este problema desde hace un mes y pico. Aquí abrieron un colector que, supuestamente, se encuentra tapado y resulta que están esperando unos tubos que nunca llegan. Mientras dejaron los trabajos abandonados y la calle abandonada está colapsada. Nosotros, como propietarios, tuvimos que cerrar la calle realmente", expresó Pascual Calviello, citado en El Tiempo.

Hizo un llamado a las autoridades para que, por favor, le presten atención a esta situación, que para la comunidad es de urgencia.

Por su parte, según explica José Luis Gómez, otro vecino, la acumulación de las aguas negras en los tramos de la carretera que fueron abiertos ha ido socavando la tierra. "Esto impide el paso automotor hacia las demás viviendas, ocasionando poco flujo de carros, al extremo de que ya no podemos entrar a nuestras urbanizaciones", resaltó.

Todo esto, aseguran, pese a que de tanto solicitar llevaron una retroexcavadora el martes de Semana Santa para cerrar un tramo de la zanja, pero desde entonces no han avanzado en los trabajos para solucionar el problema.

Elena Carmona comentó que toda la comunidad es afectada por este colector caído, por lo que instó a las autoridades a tomar cartas en el asunto a la brevedad posible.

"Esto es un problema de insalubridad porque tenemos todas las tanquillas llenas de aguas negras. Ahora con las lluvias se acrecienta más la situación y acá hay niños y adultos mayores. Toda la comunidad está siendo afectada", declaró Carmona.

Se conoció que con la lluvia caída el 24 de abril se desbordaron las cloacas y las aguas negras llegaron hasta la entrada de los conjuntos residenciales.

Nada más en Las Trinitarias B y C, se calcula que más 260 personas se encuentran perjudicadas por esta situación.