Espacio publicitario

Las estafas más comunes en Tinder y cómo detectarlas

El documental de Netflix popularizo las historias de mujeres engañadas

  • NOTA DE PRENSA

04/09/2022 08:00 am

Con 75 millones de usuarios activos mensuales y 10,6 millones de suscriptores, en 10 años Tinder registró más de 70 mil millones de usuarios que hicieron “match” y que dieron lugar a 1,5 millones de citas por semana. Es por eso que ESET explica que a medida que los usuarios se sienten más cómodos buscando pareja en el mundo digital, cualquiera sea la plataforma, es probable que también estén menos alertas y puedan ser víctimas de gente con malas intenciones.

El documental de Netflix, Tinder Swindler, popularizó la historia de distintas mujeres que han sido estafadas por el mismo hombre: una persona real, un perfil con varias fotos, cuentas de redes sociales vinculadas e incluso verificación de fotos, que logró robar 10 millones de dólares después de engañar a sus víctimas y atraerlas para que financien su lujoso estilo de vida. Al igual que él, hay muchas otras personas que buscan aprovecharse de la personas que anhelan conocer a alguien, ya sea para enamorarse y establecer una relación o solo por una noche.

A continuación te contamos cuáles son las estafas más comunes para que estén alertas

Estafa del código de verificación en Tinder. En este caso un contacto con el que se hace match, contacta y pide si lo puedes ayudar recibiendo un código a tu teléfono. Este código suele ser la clave de verificación para acceder a tu cuenta de Facebook, Snapchat, WhatsApp o de tu cuenta bancaria. También suelen utilizar esta estafa en Whatsapp.

Perfiles falsos. Esta es la estafa básica. Delincuentes crean perfiles falsos, ya sea utilizando imágenes de bancos que parecen extraídas del catálogo de una agencia de modelos o, por el contrario, utilizando imágenes super amateur, borrosas y sexualmente sugerentes. Una vez en contacto, con la excusa de que “no pasan mucho tiempo en Tinder”, solicitan el número de teléfono para conversar a través de WhatsApp y “conocerse mejor”. En esta etapa, ya se está entregando información personal y es más fácil para el estafador encontrar los perfiles de redes sociales.

“Catfishing“. A veces, los estafadores no quieren dinero; en cambio, es posible que quieran atención o compañía. Existen muchas personas que crean perfiles falsos utilizando información personal, fotos y videos robados de otras personas, generalmente de alguien a quien estafaron previamente. Puede sonar inofensivo, pero este tipo de fraude puede causar mucha angustia y puede durar meses o años. Estos usuarios están listos para llevar sus mentiras tan lejos como sea necesario para que logren que se enamoren de ellos.

Sextorsión. “Enviar desnudos” y hacer “sexting”, dos actividades que son tan populares como profundamente riesgosas, convierten a las personas en un objetivo fácil para que los estafadores se aprovechen. A pesar de que es cada vez más común compartir fotos al desnudo, esto sigue siendo algo que la sociedad espera que sea privado. La sextorsión es un delito muy serio que puede generar mucho dolor y angustia e incluso ha provocado que algunas víctimas se quiten la vida. Tinder no permite que los usuarios compartan imágenes, pero una vez que fuera de su ecosistema en una aplicación diferente, los usuarios pueden convertirse en una presa fácil.

Suplantación de identidad.
Estar en Tinder también implica que se está expuesto a un posible ataque de malware y/o de phishing. Es fácil que engañen para que se abra un enlace que no deberías o para que se comparta con un delincuente un código que le dará al atacante acceso a otras cuentas.

Estafas románticas financieras. Esta estafa es la más difícil de detectar y también de realizar. Las estafas románticas existen desde siempre, pero con la digitalización los estafadores han logrado llegar mucho más lejos que nunca gracias a las apps y sitios de citas. Lo que hacen estos delincuentes es preparar a la víctima durante el tiempo que sea necesario para obtener algo a cambio. Son personas reales, con perfiles reales, pero con intenciones profundamente malas que no solo buscan a personas con altos ingresos: hacen que se paguen almuerzos y cenas caras, algo que muchos harán para impresionar, es suficiente para muchos.

Es posible mantenerse protegido con estas recomendaciones: No salir de Tinder para continuar la conversación en otras aplicaciones de mensajería. Esto mantendrá el entorno más seguro donde se puede denunciar fácilmente a un estafador y de esta manera protegerse uno y también a otros usuarios. No abrir enlaces enviados a través de Tinder. Si se decide continuar la conversación en otra aplicación, como WhatsApp, no enviar fotos tuyas que puedan ser utilizadas por un tercero para extorsionarte. Confiar en tu instinto. Si un perfil parece demasiado bueno para ser verdad o está demasiado incompleto, es preferible deslizar el dedo hacia la izquierda y protegerse de una posible estafa.
Siguenos en Telegram, Instagram, Facebook y Twitter para recibir en directo todas nuestras actualizaciones
-

Espacio publicitario

Espacio publicitario

Espacio publicitario

DESDE TWITTER

EDICIÓN DEL DÍA

Espacio publicitario

Espacio publicitario