Sombras del Mal: El Monstruo del Tren
Un asesino sangriento aterrorizó a Génova a finales de la década de los 90
El 17 de diciembre de 2020 moría una de las víctimas de pandemia del Covid-19. Un asesino en serie quien purgaba 13 condenas a cadena perpetua por los asesinatos de 17 personas. Ese día el italiano Donato Bilancia cumplía el destino impuesto por la justicia, el “Monstruo del Tren” moría tras las rejas.
Se sabe que nació el 10 de julio de 1951 y que tuvo una infancia que calificó de “difícil”. En su primera juventud se dedicó al hurto y el robo, en 1976 fue enviado a la cárcel por robo y pocos meses más tarde escaparía.
Por años vivió como un delincuente de poca monta. En 1982 ocurrió algo que lo transformó: su hermano se suicidó lanzándose a los rieles del tren con su sobrino en brazos. A partir de ese momento comenzó a presentar una conducta errática.
Ocho años más tarde, Donato quedó en coma profundo por varios días tras un accidente de tránsito, al despertar tenía una nueva afición: El juego. A pesar de tener éxito en el juego, no se alejó de los robos, eran su forma de financiarse.
El 16 de octubre de 1997, cometió su primer asesinato: asfixió con cinta adhesiva a Giorgio Cantarano porque creyó que se había burlado de él.
El monstruo despertaba. El 24 de octubre mató a Maurizio Parenti y Carla Scotto, por el mismo motivo. Antes de huir robó casi 7 mil euros.
Tres días más tarde, otro doble asesinato: Bruno Solari, y su esposa Maria Luigia cayeron muertos a tiros en otro robo. El 13 de noviembre de 1997 mató a Luciano Marro, en Ventimiglia, le robó 22.500 euros, y el 25 de enero de 1998 asesinó a Giangiorgio Canu.
Luego sus víctimas y sus motivos, cambiaron. Comenzó a asesinar prostitutas en trenes. El 9 de marzo de 1998 disparó a Stela Truya; el 18 de marzo de 1998, mató a la ucraniana Ljudmyla Zubskova. El 20 de marzo baleó a Enzo Gorni.
El 24 de marzo la transexual Lorena Castro logró escapar de su ataque y alertó a dos guardias de seguridad, Massimiliano Garillo y Candido Randò, ambos fueron asesinados por Bilancia.
Tras el doble asesinato en la estación, los medios comenzaron a darle cobertura al caso que denominaron “El Monstruo del Tren” y acusaron a la policía de ineficiente. La cobertura mediática no detuvo la racha asesina: El 29 de marzo mató a tiros a la nigeriana Tessy Adobo.
Bilancia totalmente desatado, asesinó a Elisabetta Zoppetti en el baño del tren el 12 de abril de 1998; dos días más tarde a otra prostituta, Kristina Valla, y el 18 de abril a Maria Angela Rubino. La última víctima de Bilancia fue Giuseppe Mileto, trabajador de una gasolinera.
El 6 de mayo de 1998, la policía dio con su apartamento y Bilancia fue detenido en Génova. La policía encontró la Smith & Wesson con que asesinaba, además hallaron 50 balas.
Con frialdad, Bilancia relató cómo asesinó a cada víctima. El 12 de abril del 2000 la Corte Suprema de Génova lo condenó a 13 cadenas perpetuas por las 17 muertes y catorce años más por el intento de asesinato de Lorena Castro.
Las cadenas perpetuas fueron cortas, el 17 de diciembre de 2020 Bilancia murió por complicaciones derivadas del Covid-19.
Fotoleyenda
Donato Bilancia, “El Monstruo del Tren”
Se sabe que nació el 10 de julio de 1951 y que tuvo una infancia que calificó de “difícil”. En su primera juventud se dedicó al hurto y el robo, en 1976 fue enviado a la cárcel por robo y pocos meses más tarde escaparía.
Por años vivió como un delincuente de poca monta. En 1982 ocurrió algo que lo transformó: su hermano se suicidó lanzándose a los rieles del tren con su sobrino en brazos. A partir de ese momento comenzó a presentar una conducta errática.
Ocho años más tarde, Donato quedó en coma profundo por varios días tras un accidente de tránsito, al despertar tenía una nueva afición: El juego. A pesar de tener éxito en el juego, no se alejó de los robos, eran su forma de financiarse.
El 16 de octubre de 1997, cometió su primer asesinato: asfixió con cinta adhesiva a Giorgio Cantarano porque creyó que se había burlado de él.
El monstruo despertaba. El 24 de octubre mató a Maurizio Parenti y Carla Scotto, por el mismo motivo. Antes de huir robó casi 7 mil euros.
Tres días más tarde, otro doble asesinato: Bruno Solari, y su esposa Maria Luigia cayeron muertos a tiros en otro robo. El 13 de noviembre de 1997 mató a Luciano Marro, en Ventimiglia, le robó 22.500 euros, y el 25 de enero de 1998 asesinó a Giangiorgio Canu.
Luego sus víctimas y sus motivos, cambiaron. Comenzó a asesinar prostitutas en trenes. El 9 de marzo de 1998 disparó a Stela Truya; el 18 de marzo de 1998, mató a la ucraniana Ljudmyla Zubskova. El 20 de marzo baleó a Enzo Gorni.
El 24 de marzo la transexual Lorena Castro logró escapar de su ataque y alertó a dos guardias de seguridad, Massimiliano Garillo y Candido Randò, ambos fueron asesinados por Bilancia.
Tras el doble asesinato en la estación, los medios comenzaron a darle cobertura al caso que denominaron “El Monstruo del Tren” y acusaron a la policía de ineficiente. La cobertura mediática no detuvo la racha asesina: El 29 de marzo mató a tiros a la nigeriana Tessy Adobo.
Bilancia totalmente desatado, asesinó a Elisabetta Zoppetti en el baño del tren el 12 de abril de 1998; dos días más tarde a otra prostituta, Kristina Valla, y el 18 de abril a Maria Angela Rubino. La última víctima de Bilancia fue Giuseppe Mileto, trabajador de una gasolinera.
El 6 de mayo de 1998, la policía dio con su apartamento y Bilancia fue detenido en Génova. La policía encontró la Smith & Wesson con que asesinaba, además hallaron 50 balas.
Con frialdad, Bilancia relató cómo asesinó a cada víctima. El 12 de abril del 2000 la Corte Suprema de Génova lo condenó a 13 cadenas perpetuas por las 17 muertes y catorce años más por el intento de asesinato de Lorena Castro.
Las cadenas perpetuas fueron cortas, el 17 de diciembre de 2020 Bilancia murió por complicaciones derivadas del Covid-19.
Fotoleyenda
Donato Bilancia, “El Monstruo del Tren”
Siguenos en
Telegram,
Instagram,
Facebook y
Twitter
para recibir en directo todas nuestras actualizaciones