Espacio publicitario

Historias de la Violencia. El asesinato de “El Coloso”

La vida de Antonio Cermeño giró alrededor de polémicas, alianzas con el gobierno y peleas.

  • CARLOS D' HOY

11/12/2022 07:30 am

La vida de los boxeadores no es fácil. Parece un lugar común, pero la pobreza es la cuna de muchos de los grandes narices chatas y quizá esa fuerza y ese ímpetu que los caracteriza sea el resultado de un ambiente duro y salvaje.

Antonio Cermeño es uno de esos campeones difíciles de olvidar. Campeón de los pesos supergallo y pluma de la Asociación Mundial de Boxeo. Su carrera profesional duró 16 años, entre septiembre de 1990 hasta el 2 de septiembre de 2006, en los que participó en 52 combates en los que logró un récord de 41 victorias, 35 de ellas terminaron al mandar a las lonas a su contendiente. Durante su carrera fue derrotado en siete oportunidades, una de ellas por knockout.

Durante varios años “El Coloso” Cermeño fue dirigido por el polémico promotor Don King, quien hoy en día es conocido, no solo por las grandes peleas que organizó, sino también por los escándalos en los que fue acusado de apropiarse de la fortuna de muchos de sus pupilos, así como por sus vínculos con las “familias criminales” norteamericanas.

Tras su derrota contra Santos Benavides, en el Gimnasio Alexis Argüello, Managua, Nicaragua, el 2 de septiembre de 2006, Cermeño se bajó de los cuadriláteros, pero ya tenía fuertes vínculos con el gobierno.

En 2003 creó con el respaldo de la Oficina Nacional Antidrogas (ONA), la fundación “Kantarón Cermeño” que prometía darle “un knockout a las drogas”. Estuvo muy vinculado con el gobierno, no solo a través de Kantarón Cermeño, sino que también fue fundador del Movimiento por la Paz, iniciativa del gobierno en la lucha contra la inseguridad, participaba en programas gubernamentales para el desarme de bandas y promoción del deporte como herramienta en la prevención del delito.

Pero no todo era tan bonito, tras su retiro El Coloso comenzó a tambalearse, estuvo detenido en tres oportunidades por lesiones personales, violencia física y homicidio intencional. Su historial se remonta a 1996 cuando hirió a un hombre en una pierna, presuntamente se le escapó un disparo y terminó hiriendo a un joven en una pierna

En el año 2000, estuvo involucrado en varios tiroteos ocurridos en discotecas, uno de estos enfrentamientos culminó con un asesinato. Cermeño fue arrestado por su presunta participación en el asesinato y salió en libertad por un beneficio otorgado por el Circuito Judicial Penal del Estado Miranda.

En septiembre de ese mismo año estuvo involucrado en otro tiroteo con heridos en Caracas, fue detenido y nuevamente fue liberado.

En junio de 2003, fue detenido por una presunta estafa que habría cometido en la venta de 15.000 dólares. Una dama le habría entregado a Cermeño 34 mil bolívares en efectivo, a cambio de 15 mil dólares que le iba a vender, la mujer nunca recibió los dólares prometidos.

Pocos meses más tarde, Cermeño fue interrogado por sospecha de haber participado en el secuestro de un comerciante. La víctima huyó de los secuestradores y no se presentó para denunciar el secuestro. Cermeño no fue acusado de ningún cargo en su contra.

Luego, El Coloso desapareció de las noticias, hasta el 25 de febrero de 2014 cuando realizaba unas compras en Makro de La Urbina, junto a las personas que lo acompañaban, fue interceptado por delincuentes, quienes se los llevaron a todos con sentido a Guarenas.

Los secuestradores se detuvieron a cargar combustible y los acompañantes de Cermeño aprovecharon para huir, el pugilista quedó en manos de los secuestradores y no se supo más nada de él.

Su cadáver fue localizado el día siguiente en la vía Caucagua Higuerote, tenía varios impactos de bala.

Tras su muerte, las autoridades, anunciaron, como ocurre con todos los casos en los que un miembro o aliado del gobierno es víctima de la violencia, que el caso estaba vinculado con su militancia política, se acusó que sicarios fueron contratados para asesinarlo.

Finalmente, un hombre fue detenido por el caso, Javier Enrique Urbina Burguillos, de 26 años, fue acusado del asesinado de Cermeño. Urbina fue imputado por los delitos de homicidio calificado en la ejecución de un robo y privación ilegítima de libertad, fue recluido en la cárcel de El Rodeo y así se desarmó la tesis del asesinato por razones políticas del Coloso con pies de barro Antonio Cermeño.
Siguenos en Telegram, Instagram, Facebook y Twitter para recibir en directo todas nuestras actualizaciones
-

Espacio publicitario

Espacio publicitario

Espacio publicitario

DESDE TWITTER

EDICIÓN DEL DÍA

Espacio publicitario

Espacio publicitario