En un comunicado firmado por el monarca inglés y difundido por medios locales, Carlos III alude a los daños causados por la borrasca Boris el pasado fin de semana, que han afectado a países como República Checa, Polonia o Rumanía y se han saldado, hasta al fecha, más de 23 muertos.

El monarca indica que tanto él como su esposa, Camila, se encuentran "profundamente conmocionados y con una tristeza profunda al ver la destrucción y devastación ocasionada por inundaciones en el centro de Europa".

"Muchas personas en el Reino Unido mantienen lazos sólidos, duraderos y personales con la región y, junto con ellos, mi esposa y yo enviamos nuestras más profundas y sentidas condolencias a todos aquellos que han perdido trágicamente a sus seres queridos, sus hogares y sus vidas", señala.

"Sentimos una inmensa admiración por el puro coraje y dedicación de los servicios de emergencia de la región que han trabajado, claramente, sin descanso a fin de proporcionar un apoyo desesperadamente necesario, alivio y asistencia a las incontables personas cuyas vidas y propiedades han sido alteradas de esta manera tremenda", dijo.