El rey Guillermo-Alejandro y la reina Máxima de los Países Bajos participaron en los actos que conmemoraron el Día Nacional de la Esclavitud que tuvo lugar en The Oosterpark, Ámsterdam. Durante su discurso se disculpó oficialmente por el pasado esclavista de su país durante la época colonial y afirmó sentirse “personal e intensamente” afectado.
El rey expresó: “pido perdón por la clara falta de acción frente a este crimen de lesa humanidad”. Posteriormente depositó una ofrenda floral acompañado de su esposa, la reina Máxima. Este año se cumplen 150 años del fin de la esclavitud en las colonias holandesas.
En la ceremonia se encontraban descendientes de esclavos de Surinam, Aruba y Curazao. Esta ceremonia se conoce también como Keti-Koti, que quiere decir romper o cortar las cadenas. Esta ceremonia es solo el comienzo de un programa de actividades para recordar el 1 de julio de 1863.
Los reyes con sus hijas y Mambo, posan en la playa de Zuiderstrand FOTOS KOEN VAN WEEL AFP
La familia completa llevó un atuendo estival ya que prevalecieron los tonos claros y telas como el lino y el algodón.
En esta oportunidad, las tres princesas hablaron con la prensa. Amalia, la mayor y la heredera, sigue a paso firme, pero con mucha discreción, asumiendo su rol. Incluso, en su vestuario se pudo ver un poco más formalidad que en el de sus hermanas al llevar una chaqueta, al mismo tiempo que muestra la gran empatía que guarda hacia su padre, quien es su guía y maestro.
Alexia, la segunda, confirma que es la más coqueta, no sólo por llevar el modelo de más estilo sino por su pose ante las cámaras. Fue la que rompió la manera de vestir con sus hermanas al no llevar sneakers sino unas botas vaqueras.
Ariana, la más pequeña, todavía conserva cierta timidez, pero ya se observa que también, al igual que su madre, es aficionada a los colores brillantes.
En esta edición se sumó otro miembro de la familia, el perrito Mambo, que lo adoptaron en 2021 y que se mostró muy cercano a la reina Máxima, quien prefirió un traje blanco de lino. Por otra parte, los soberanos se mostraron como un matrimonio consolidado que se apoyan mutuamente.
La princesa Amalia de Orange
El rey expresó: “pido perdón por la clara falta de acción frente a este crimen de lesa humanidad”. Posteriormente depositó una ofrenda floral acompañado de su esposa, la reina Máxima. Este año se cumplen 150 años del fin de la esclavitud en las colonias holandesas.
En la ceremonia se encontraban descendientes de esclavos de Surinam, Aruba y Curazao. Esta ceremonia se conoce también como Keti-Koti, que quiere decir romper o cortar las cadenas. Esta ceremonia es solo el comienzo de un programa de actividades para recordar el 1 de julio de 1863.
Los reyes con sus hijas y Mambo, posan en la playa de Zuiderstrand FOTOS KOEN VAN WEEL AFP
El Posado real
Pero además de este acto formal y de tan relevante significado, la familia real de los Países Bajos tuvo con anterioridad el encuentro anual con la prensa que se lleva a cabo todos los veranos. En esta oportunidad la sesión de fotográfica tuvo lugar en la playa de Zuiderstrand, también conocida como la playa tranquila, en La Haya.
Pero además de este acto formal y de tan relevante significado, la familia real de los Países Bajos tuvo con anterioridad el encuentro anual con la prensa que se lleva a cabo todos los veranos. En esta oportunidad la sesión de fotográfica tuvo lugar en la playa de Zuiderstrand, también conocida como la playa tranquila, en La Haya.
La familia completa llevó un atuendo estival ya que prevalecieron los tonos claros y telas como el lino y el algodón.
En esta oportunidad, las tres princesas hablaron con la prensa. Amalia, la mayor y la heredera, sigue a paso firme, pero con mucha discreción, asumiendo su rol. Incluso, en su vestuario se pudo ver un poco más formalidad que en el de sus hermanas al llevar una chaqueta, al mismo tiempo que muestra la gran empatía que guarda hacia su padre, quien es su guía y maestro.
Guillermo Alejandro y Máxima de los Países Bajos, una pareja que reina en cooperación
Alexia, la segunda, confirma que es la más coqueta, no sólo por llevar el modelo de más estilo sino por su pose ante las cámaras. Fue la que rompió la manera de vestir con sus hermanas al no llevar sneakers sino unas botas vaqueras.
Ariana, la más pequeña, todavía conserva cierta timidez, pero ya se observa que también, al igual que su madre, es aficionada a los colores brillantes.
En esta edición se sumó otro miembro de la familia, el perrito Mambo, que lo adoptaron en 2021 y que se mostró muy cercano a la reina Máxima, quien prefirió un traje blanco de lino. Por otra parte, los soberanos se mostraron como un matrimonio consolidado que se apoyan mutuamente.
La princesa Amalia de Orange
Durante la conversación con los periodistas
La reina Máxima con su mascota Mambo
La reina Máxima con su mascota Mambo
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