Por Andrés González Majul, director del cortometraje documental Sex Assistant.
Cualquier propuesta para un mejor futuro solo es creíble en la medida que reconozca y valide abiertamente la hiper complejidad de dimensiones jamás antes presenciadas en la que vivimos. Debemos anticipar situaciones que nunca habíamos percibido. Sospechar aquello que todavía desconocemos que desconocemos.
Las realidades incómodas no suelen ser muy populares para aquella población que considera que no influye sobre el destino del mundo. Menos para quienes aún, ostentando mucho poder, encuentran que no pueden solucionarlo todo. La naturaleza y las circunstancias en las que vivimos nos obligan a superar esa inocencia que solo espera docilidad.
Es un reto inmenso, paradójico y necesario en un mundo tan virtual, a distancia, ornamentado con realidades aumentadas que nos inundan de gratificación instantánea, pero en el cual nos hemos visto apreciando mucho más lo primario de la cotidianidad tangible, a nuestros cercanos, familiares , identidades y tribus contemporáneas.
Los lazos entre ONG's y mecanismos de la ONU, que fervientemente crean consciencia y toman acción sobre múltiples asuntos en derechos humanos, proporcionan una luz que cierra brechas entre problemas y soluciones. Estos deben acercarse más y apalancarse. Pertenezco a la ONG (Organización Nelson Garrido) donde generamos expresión y libertad a través de la realización de imágenes. Esta ONG representa un espacio para los que no tienen espacio. Allí damos cabida a propuestas y estéticas alternativas permeadas de asuntos de derechos y la condición humana.
Espero que podamos crear un tipo de futuro donde, ante tantas diferencias de expresión individual del ser, ante tantas peculiaridades de los grupos y comunidades, tantos problemas urgentes y masivos, tanto ruido y aparente caos; surja y podamos garantizar, a gran escala, lo que necesitamos necesitamos los seres humanos. Siempre resguardando las libertades. Donde plantear la crudeza de la realidad no sea producto del cinismo, sino de una madurez optimista para responsabilizarnos por generar soluciones.
Ante tanta incertidumbre, una gran conversación mundial es vital. Opinar en la encuesta UN75.online no es solo una oportunidad sin precedentes para hacerse escuchar, sino un deber humano de participación para honrar los cimientos sobre los cuales fue fundada la Organización de las Naciones Unidas.
Uno descubre su inocencia cuando la pierde. Esto asegura la profesora de diseño y bioarquitectura del MIT, Neri Oxman, al relatar el fuerte conflicto que experimentó al servir en las fuerzas armadas de Israel durante su juventud temprana. Ella afirma que sintió un profundo deseo de proteger su propia identidad étnica y al mismo tiempo anhelaba abrazar otras identidades.
Cualquier propuesta para un mejor futuro solo es creíble en la medida que reconozca y valide abiertamente la hiper complejidad de dimensiones jamás antes presenciadas en la que vivimos. Debemos anticipar situaciones que nunca habíamos percibido. Sospechar aquello que todavía desconocemos que desconocemos.
Las realidades incómodas no suelen ser muy populares para aquella población que considera que no influye sobre el destino del mundo. Menos para quienes aún, ostentando mucho poder, encuentran que no pueden solucionarlo todo. La naturaleza y las circunstancias en las que vivimos nos obligan a superar esa inocencia que solo espera docilidad.
Se muestra más sano y sabio ofrecer discursos de templanza como el de Churchill al ofrecer sangre, sacrificio, sudor y lágrimas que discursos como el de Martin Luther King Jr. teniendo un gran sueño colectivo. Aunque ambos fueron muy potentes y necesarios en sus circunstancias históricas, el primero de ellos demanda una actitud más estoica y menos onírica, acorde a estos tiempos. Con tal velocidad de cambios inéditos es imperativo poder detenernos a contemplar en el desasosiego, para entender, repensar y reinventarnos.
Es un reto inmenso, paradójico y necesario en un mundo tan virtual, a distancia, ornamentado con realidades aumentadas que nos inundan de gratificación instantánea, pero en el cual nos hemos visto apreciando mucho más lo primario de la cotidianidad tangible, a nuestros cercanos, familiares , identidades y tribus contemporáneas.
Los lazos entre ONG's y mecanismos de la ONU, que fervientemente crean consciencia y toman acción sobre múltiples asuntos en derechos humanos, proporcionan una luz que cierra brechas entre problemas y soluciones. Estos deben acercarse más y apalancarse. Pertenezco a la ONG (Organización Nelson Garrido) donde generamos expresión y libertad a través de la realización de imágenes. Esta ONG representa un espacio para los que no tienen espacio. Allí damos cabida a propuestas y estéticas alternativas permeadas de asuntos de derechos y la condición humana.
Espero que podamos crear un tipo de futuro donde, ante tantas diferencias de expresión individual del ser, ante tantas peculiaridades de los grupos y comunidades, tantos problemas urgentes y masivos, tanto ruido y aparente caos; surja y podamos garantizar, a gran escala, lo que necesitamos necesitamos los seres humanos. Siempre resguardando las libertades. Donde plantear la crudeza de la realidad no sea producto del cinismo, sino de una madurez optimista para responsabilizarnos por generar soluciones.
Ante tanta incertidumbre, una gran conversación mundial es vital. Opinar en la encuesta UN75.online no es solo una oportunidad sin precedentes para hacerse escuchar, sino un deber humano de participación para honrar los cimientos sobre los cuales fue fundada la Organización de las Naciones Unidas.
- El licenciado Andrés González Majul (venezolano) es director del cortometraje documental Sex Assistant sobre intimidad y discapacidad, estrenado en 2019 en Viña del Mar. Pertenece al círculo de fotógrafos de La Organización Nelson Garrido. Vocalista de la Simón Bolívar Big Band Jazz del Sistema Nacional de Orquestas. Trabajó en gestión cultural en la Embajada de Venezuela ante los Estados Unidos en Washington DC Licenciado en Comunicación Social (UCAB) con diplomado en Imagen y Poder de Personalidades Públicas (UCV).
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