El representante palestino ante Naciones Unidas, Riad Mansur, rompió a llorar durante su intervención al hablar de la situación en la Franja de Gaza, en medio de la devastadora ofensiva militar israelí que, según sus palabras, ya ha dejado más de 54.000 muertos.
"¿Cómo puede alguien soportar este dolor?", preguntó Mansur visiblemente afectado, al borde del llanto. "Las llamas y el hambre están devorando a los niños palestinos. Ver esta situación sin que tengamos el coraje de actuar es insoportable para cualquier ser humano normal".
Durante su intervención, el diplomático palestino relató con crudeza el impacto del conflicto sobre los más vulnerables: más de 1.300 niños muertos y cerca de 4.000 heridos desde la reanudación de los combates en marzo, cuando Israel rompió el alto el fuego. "Decenas de niños mueren de hambre. Las imágenes de madres abrazando los cuerpos inmóviles de sus hijos, acariciándoles el pelo, disculpándose…", dijo entre pausas.
Mansur denunció la inacción internacional y cargó con dureza contra el Gobierno de Israel, acusándolo de utilizar el bloqueo y el control de la ayuda humanitaria como herramientas de represión. "Hay crueldad en los bombardeos, en la destrucción desenfrenada, en el bloqueo e incluso en la distribución limitada de ayuda", afirmó.
Pone en duda la intención humanitaria de Israel
El diplomático insistió en que si Israel tuviera una verdadera intención humanitaria, permitiría la entrada total y segura de ayuda a través de los cruces fronterizos, en coordinación con agencias como la UNRWA. En cambio, sostuvo, lo que se vive en Gaza "es una estrategia para hacer inviable la vida", forzando a los palestinos al éxodo. "La verdadera preocupación de Israel es cómo deshacerse de los palestinos: matándolos de hambre o destruyendo Gaza", denunció.
Mansur también criticó directamente al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, por "burlarse" de las denuncias de hambruna, pese a la "abrumadora evidencia" y once semanas de bloqueo total. "Esto indigna al pueblo palestino, a todos, incluyéndome a mí", concluyó visiblemente emocionado.
"¿Cómo puede alguien soportar este dolor?", preguntó Mansur visiblemente afectado, al borde del llanto. "Las llamas y el hambre están devorando a los niños palestinos. Ver esta situación sin que tengamos el coraje de actuar es insoportable para cualquier ser humano normal".
Durante su intervención, el diplomático palestino relató con crudeza el impacto del conflicto sobre los más vulnerables: más de 1.300 niños muertos y cerca de 4.000 heridos desde la reanudación de los combates en marzo, cuando Israel rompió el alto el fuego. "Decenas de niños mueren de hambre. Las imágenes de madres abrazando los cuerpos inmóviles de sus hijos, acariciándoles el pelo, disculpándose…", dijo entre pausas.
Mansur denunció la inacción internacional y cargó con dureza contra el Gobierno de Israel, acusándolo de utilizar el bloqueo y el control de la ayuda humanitaria como herramientas de represión. "Hay crueldad en los bombardeos, en la destrucción desenfrenada, en el bloqueo e incluso en la distribución limitada de ayuda", afirmó.
Pone en duda la intención humanitaria de Israel
El diplomático insistió en que si Israel tuviera una verdadera intención humanitaria, permitiría la entrada total y segura de ayuda a través de los cruces fronterizos, en coordinación con agencias como la UNRWA. En cambio, sostuvo, lo que se vive en Gaza "es una estrategia para hacer inviable la vida", forzando a los palestinos al éxodo. "La verdadera preocupación de Israel es cómo deshacerse de los palestinos: matándolos de hambre o destruyendo Gaza", denunció.
Mansur también criticó directamente al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, por "burlarse" de las denuncias de hambruna, pese a la "abrumadora evidencia" y once semanas de bloqueo total. "Esto indigna al pueblo palestino, a todos, incluyéndome a mí", concluyó visiblemente emocionado.
Fuente: Onda Cero
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