Imágenes de consumidores llevándose pilas de maples de huevos de los supermercados, como ocurría con el papel higiénico durante la pandemia, se hicieron virales.
La realidad no está muy lejos. Las autoridades estadounidenses detectaron un aumento del contrabando de huevos de gallina de Canadá a Estados Unidos. Entre enero y febrero, los agentes de la Agencia de Aduanas y Protección Fronteriza interceptaron un 116 % más de huevos de contrabando procedentes de Canadá que en los dos meses anteriores. Los huevos también se contrabandean a través de la frontera con México.
En febrero, el precio medio de una docena de huevos en el país era de 5,90 dólares, casi un dolar más que en enero aunque en estados como Florida el precio puede superar los seis dólares. Pero en algunas góndolas el precio supera los 10 dólares. La docena de huevos en el lado canadiense se puede comprar por 2,52 dólares.
Una solución a la crisis de los huevos es alquilar una gallina ponedora o dos o tres.
La realidad no está muy lejos. Las autoridades estadounidenses detectaron un aumento del contrabando de huevos de gallina de Canadá a Estados Unidos. Entre enero y febrero, los agentes de la Agencia de Aduanas y Protección Fronteriza interceptaron un 116 % más de huevos de contrabando procedentes de Canadá que en los dos meses anteriores. Los huevos también se contrabandean a través de la frontera con México.
El precio de los huevos en Estados Unidos se disparó por un brote de gripe aviar, que afecta desde hace un año la producción de aves de corral, con el consecuente sacrificio de más de 20 millones de gallinas ponedoras.
En febrero, el precio medio de una docena de huevos en el país era de 5,90 dólares, casi un dolar más que en enero aunque en estados como Florida el precio puede superar los seis dólares. Pero en algunas góndolas el precio supera los 10 dólares. La docena de huevos en el lado canadiense se puede comprar por 2,52 dólares.
Dicho esto, los huevos, fundamentales en la dieta de los estadounidenses, que adoran comerlos desde el desayuno hasta la cena, pasaron de ser un insumo común y corriente a un objeto de deseo.
Una solución a la crisis de los huevos es alquilar una gallina ponedora o dos o tres.
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