El presidente electo argentino, Javier Milei, recibió este sábado en Buenos Aires a la delegación presidencial de Estados Unidos, encabezada por la secretaria del Departamento de Energía de ese país, Jennifer Granholm, que llegó a Argentina para asistir al traspaso de mando este domingo.
La delegación estadounidense conversó con Milei "sobre las prioridades compartidas entre ambos países en la defensa de los derechos humanos, las inversiones en energía limpia y la cooperación regional y multilateral", según comunicó la embajada de Estados Unidos en Argentina en redes sociales.
Además de Granholm y el embajador estadounidense en Argentina, Marc Stanley, la delegación norteamericana estuvo integrada por el subsecretario para Política de Transporte, Carlos Monje; el secretario Adjunto de Asuntos Internacionales del Departamento de Energía, Andrew E. Light, y el director Principal para el Hemisferio Occidental del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Juan González.
En la reunión, celebrada en el Palacio San Martín (sede de la Cancillería argentina), Milei estuvo acompañado por su ministra de Exteriores designada, Diana Mondino, y el empresario Gerardo Werthein, a quien el presidente electo eligió futuro embajador de Argentina en Estados Unidos.
El primer viaje que hizo Milei como presidente electo fue, a fines de noviembre, a Estados Unidos, donde visitó en Nueva York la tumba del rabino Schneerson en el cementerio judío de Montefiore, y en Washington almorzó con el expresidente Bill Clinton (1993-2001) y el asesor especial para las Américas de Joe Biden, Chris Dodd.
El mandatario electo viajó con su hermana y principal asesora, Karina Milei; su futuro jefe de gabinete, Nicolás Posse, y su ministro de Economía designado, Luis Caputo, además de Werthein y Stanley.
En la Casa Blanca, Milei fue recibido por el consejero de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan; el subsecretario de Estado para Latinoamérica, Brian Nichols; y González.
Sus colaboradores se reunieron con representantes del Tesoro estadounidense y del Fondo Monetario Internacional, con el que Argentina tiene una deuda de 45.000 millones de dólares.
Tras su victoria en la segunda vuelta de las elecciones, el 19 de noviembre, Milei habló por teléfono con Biden y con el expresidente Donald Trump (2017-2021), a quien también invitó a la investidura, pero su asistencia no está prevista.
La delegación estadounidense conversó con Milei "sobre las prioridades compartidas entre ambos países en la defensa de los derechos humanos, las inversiones en energía limpia y la cooperación regional y multilateral", según comunicó la embajada de Estados Unidos en Argentina en redes sociales.
Además de Granholm y el embajador estadounidense en Argentina, Marc Stanley, la delegación norteamericana estuvo integrada por el subsecretario para Política de Transporte, Carlos Monje; el secretario Adjunto de Asuntos Internacionales del Departamento de Energía, Andrew E. Light, y el director Principal para el Hemisferio Occidental del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Juan González.
En la reunión, celebrada en el Palacio San Martín (sede de la Cancillería argentina), Milei estuvo acompañado por su ministra de Exteriores designada, Diana Mondino, y el empresario Gerardo Werthein, a quien el presidente electo eligió futuro embajador de Argentina en Estados Unidos.
El primer viaje que hizo Milei como presidente electo fue, a fines de noviembre, a Estados Unidos, donde visitó en Nueva York la tumba del rabino Schneerson en el cementerio judío de Montefiore, y en Washington almorzó con el expresidente Bill Clinton (1993-2001) y el asesor especial para las Américas de Joe Biden, Chris Dodd.
El mandatario electo viajó con su hermana y principal asesora, Karina Milei; su futuro jefe de gabinete, Nicolás Posse, y su ministro de Economía designado, Luis Caputo, además de Werthein y Stanley.
En la Casa Blanca, Milei fue recibido por el consejero de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan; el subsecretario de Estado para Latinoamérica, Brian Nichols; y González.
Sus colaboradores se reunieron con representantes del Tesoro estadounidense y del Fondo Monetario Internacional, con el que Argentina tiene una deuda de 45.000 millones de dólares.
Tras su victoria en la segunda vuelta de las elecciones, el 19 de noviembre, Milei habló por teléfono con Biden y con el expresidente Donald Trump (2017-2021), a quien también invitó a la investidura, pero su asistencia no está prevista.
Con información de Efe
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