Lo que comenzó como un emprendimiento delivery en pandemia, se transformó en un restaurante que invita a todos los amantes de la cocina asiática tailandesa a pasar un rato divertido y comer sabroso en un solo lugar, es Chop Chop.
Georges Hayek, su creador y unió sus dos pasiones, la cocina y el ingenio, en una sola, y de ahí nació Chop Chop. “En plena pandemia me puse a investigar que podía hacer mientras estaba la cuarentena. Siempre me gustó cocinar y esta comida asiática, tan diferente a la que estábamos acostumbrados”.
Y aquí es donde se diferencia Chop Chop de los demás, para su debut, Hayek decidió que su comida se vendería en una cajita roja, típica de la comida oriental, aquellas que en las películas gringas vemos cuando hacen “take out”. No solo es que la cajita es estética, sino que contiene una generosa porción de comida y además con buena sazón y sabor. La demanda fue tanta que se vieron en la necesidad de abrir su propio local y hace cuatro meses abrieron su establecimiento en centro comercial San Ignacio.
El espacio crece y la carta también. A diferencia del menú que tenían para el domicilio, la carta crece en esta nueva etapa de Chop Chop. Hay variedad de entradas, entre ellas destacan las Krabi, unas lumpias de lomito en salsa mongolian y los Prakkret, wantones rellenos de kani con queso crema y cebollín en salsa soya miel, una combinación de sabores inesperada y riquísima. Tampoco deben dejar de probar las esferas de róbalo en panko con salsa mayo-sriracha y anguila.
De principales también hay variedad de opciones. Están los platos que son una especie de poke que vienen con proteínas y acompañantes, así como solo las proteínas. En los principales están el Komodo, un plato que viene con pollo en salsa teriyaki, intervenido con sus vegetales mix salteados, edamames, merey caramelizado y coronado con una suprema de pollo empanizado, un plato super completo que no necesita nada más para dejar satisfecho. El
Bangkok con kani frito, coronado con camarones empanizados en panko, cubos de piña, edamames, merey caramelizado y salsa de anguila. Y así platos con lomito, pollo al curry y camarones y cerdo.
También están las “Full proteínas”, un apartado en donde se ofrece un plato con solo proteínas. Aquí se puede escoger una mongolian beef que es una carne preparada en una salsa de azúcar deliciosa y la carne queda crujiente y con una textura sabrosa. El pollo a la naranja, el pollo a la miel y los camarones, todos empanizados y bañados en estas ricas salsas. Y no podemos dejar de mencionar el reconfortante ramen, uno de los platos estrellas de la casa.
En cuanto a los postres el Coconut Cream es la estrella, es un helado de coco intervenido con cubos de bizcocho y cubos de piña, bañado con sirope de piña y coco deshidratado. También tienen piña tempura y el clásico brownie con helado para los más tradicionales.
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