Escritores, poetas, editores, libreros, periodistas literarios, promotores del libro crean y mantiene la literatura venezolana desde el exilio. Lamentablemente la situación política, social y económica del país ha provocado este fenómeno, especialmente en los últimos cinco años donde el talento joven decidió tomar sus maletas y abandonar sus bibliotecas en busca de un futuro mejor.

La diáspora literaria venezolana se concentra en Latinoamérica, Europa y Estados Unidos. Algunos nombres que destacan en Latinoamérica son: Gisela Kozak, Alberto Barrera Tyszka, Leonardo Padrón, Zakarías Zafra Fernández, Fedosy Santaella, Daniel Centeno, José Urriola y Jesús Miguel Soto, en México; las poetas Blanca Strepponi, Ruth Hernández Boscán, Eleonora Requena y los narradores Salvador Fleján y Gustavo Valle están radicados en Argentina. En relación a Europa, gran parte del sector vinculado al mundo literario y editorial venezolano se concentra en España, aquí vale la pena mencionar algunos nombres como Linsabel Noguera, Michelle Roche Rodríguez, Virginia Riquelme, Manuel Gerardo Sánchez, Luis Enrique Belmonte, Nelsón Rivera, Ulises Milla y Lisbeth Salas, reconocida por sus fotografías a grandes autores.

La mayorìa de los escritores, traductores y editores venezolanos radicados en Estados Unidos se han enfocado en residencias literarias o estudios de maestrias y doctorados como Enza García Arreaza, Faride Mereb, Alejandro Castro, Adalbet Salas Hernàndez, Israel Centeno, Keila Vall de la Ville, Oriette D' Angelo, Natasha Tiniacos, entre otros.

En la larga lista de nombres, se debe destacar la labor que realiza Gustavo Guerrero en Francia como asesor editorial de Ediciones Gallimard y que el próximo 10 de abril será nombrado Caballero en la Orden Nacional de las Artes y las Letras. Por su parte en Asia, al escritor y crítico literario Gregory Zambrano, quien en la actualidad es profesor e investigador en la División de Estudios Latinoamericanos de la Universidad de Tokio.

A pesar de la gran tragedia que pueda representar esta diáspora para el sector cultural del país, el lado positivo es la presencia en el exterior de los venezolanos, hecho que ha facilitado la publicación y divulgación de sus obras, también su participación en importantes ferias del libro. Con el tiempo los críticos y periodistas literarios podrán evaluar el efecto del desarraigo y el extranjerismo en la literatura venezolana y la construcción narrativa y poética de Venezuela desde la mirada huérfana que siempre lleva consigo todo aquel que emigra.

Geraldine Gutiérrez Wieken

Claudia Sierich

Hensli Rahn Solórzano

Ricardo Riera

Ana Lucía Bastos

Ana Nuño

Andrea Sofía Crespo Madrid

Ángela Molina

Antonio López Ortega

Artemis Nader

Boris Izaguirre

Carmelo Chillida

Carlos Katán

Cristina Falcon Maldonado

Daniel Fermin

David Alejandro Malavé

Diana Medina

Doménico Chiappe

Edgar Borges

Eduardo Sánchez Rugeles

Francisco Javier Pérez

Gabriela Lepage

Golcar Rojas

Juan Carlos Chirinos

Juan Carlos Méndez Guédez

Juan Manuel Morales Chávez

Karina Sainz Borgo

Laura Cracco

Lena Yau

Linsabel Noguera

Lisbeth Salas

Luis Enrique Belmonte

Manuel Gerardo Sánchez

Marcel Ventura

Marina Gasparini

Michelle Roche Rodríguez

Mónica Montañés

Nelsón Rivera

Rodrigo Blanco Calderón

Rosario Anzola

Sandra Caula

Sebastián de la Nuez

Sofía Rodríguez Meza

Saúl Rojas Blonval

Slavko Zupcic

Verónica Jaffe

Víctor Vegas

Virginia Riquelme

Ulises Milla

Camila Ríos Armas