Las revueltas que hemos visto recientemente en Colombia se iniciaron con la excusa de la reforma tributaria que el presidente Iván Duque quería poner en marcha; sin embargo de pronto se activó un plan muy bien diseñado, que toma como base “la insatisfacción del pueblo". Hoy un grupo de agitadores de oficio y delincuentes, protestan, queman y destrozan todo lo que pueden.
Venezolanos
Las autoridades colombianas han sacado a la luz pública gran cantidad de imágenes y de documentos donde se demuestra que la gente que está manifestando son profesionales y que reciben dinero e instrucciones para agitar de manera sincronizada en distintos puntos de Colombia. También hay ya han identificado cuentas fantasmas en las redes sociales utilizadas para agitar y generar falsas noticias, usando servidores en china por ejemplo, esto ya es una constante en América Latina. Entre los detenidos hay ciudadanos venezolanos: ¡qué casualidad! Los colombianos se preguntan por qué ésta gente no protesta en Venezuela, donde ciertamente hay una situación económica, social y política realmente deprimente, algo que nadie puede esconder. Esa minoría de venezolanos que están afuera, y se dedican a la delincuencia organizada, son los que están generando una gran animadversión contra una mayoría de personas que han salido del país en busca de una mejor calidad de vida, entre ellos profesionales de todas las áreas; por eso es una tarea de los que están en la diáspora identificarlos, denunciarlos y rechazarlos. ¡No podemos ser solidarios con los delincuentes!
Resentidos, por cierto
Venezolanos
Las autoridades colombianas han sacado a la luz pública gran cantidad de imágenes y de documentos donde se demuestra que la gente que está manifestando son profesionales y que reciben dinero e instrucciones para agitar de manera sincronizada en distintos puntos de Colombia. También hay ya han identificado cuentas fantasmas en las redes sociales utilizadas para agitar y generar falsas noticias, usando servidores en china por ejemplo, esto ya es una constante en América Latina. Entre los detenidos hay ciudadanos venezolanos: ¡qué casualidad! Los colombianos se preguntan por qué ésta gente no protesta en Venezuela, donde ciertamente hay una situación económica, social y política realmente deprimente, algo que nadie puede esconder. Esa minoría de venezolanos que están afuera, y se dedican a la delincuencia organizada, son los que están generando una gran animadversión contra una mayoría de personas que han salido del país en busca de una mejor calidad de vida, entre ellos profesionales de todas las áreas; por eso es una tarea de los que están en la diáspora identificarlos, denunciarlos y rechazarlos. ¡No podemos ser solidarios con los delincuentes!
Resentidos, por cierto
Varios expresidentes latinoamericanos apuntan al Foro de Sao Paulo como el promotor de toda esta revuelta, argumentando que se intenta desestabilizar las democracias de América Latina. Yo suscribo esta idea; el Foro de Sao Paulo no es más que un proyecto destinado a implementar la dominación de una izquierda, hoy día asociada a dictaduras y tiranías. Ninguna profesa aquél socialismo que luchaba por subir a los de abajo. Ahora se trata de hundir a la mayoría y conseguir atornillar en el poder a unos pocos, muy resentidos por cierto.
Le preguntaban a Paola Holguín, periodista y política colombiana, por qué ella no apoya en este momento a los manifestantes en Colombia cuando, en su oportunidad, se solidarizó de una manera tan abierta con los estudiantes venezolanos, y su respuesta fue la siguiente: “Hoy no estoy al lado de los marchantes en Colombia. Son razones muy distintas a la de los jóvenes en Venezuela; ellos luchaban en las calles por recuperar la democracia, por el derecho al trabajo, por medicinas. Aquí, en Colombia, las marchas pacíficas las infiltraron los aliados de quienes acabaron con Venezuela; ellos están en la calle tratando de quitarnos a nosotros lo que ya les arrrebataron allá: la democracia, las libertades, la Patria".
Qué lástima que en América Latina los conceptos que anteriormente eran parte del radicalismo hoy son familiares a nuestro paisaje y que lo marginal, ahora es algo normal.
Ojalá que las autoridades colombianas logren frenar la violencia y que el veneno del comunismo se espante.
Por cierto, ¿el señor Gustavo Petro en qué andará a todas estas?
davidbittanobadia@gmail.com
Twiter: @davidbittano
instagram: davidbittanobadia
Le preguntaban a Paola Holguín, periodista y política colombiana, por qué ella no apoya en este momento a los manifestantes en Colombia cuando, en su oportunidad, se solidarizó de una manera tan abierta con los estudiantes venezolanos, y su respuesta fue la siguiente: “Hoy no estoy al lado de los marchantes en Colombia. Son razones muy distintas a la de los jóvenes en Venezuela; ellos luchaban en las calles por recuperar la democracia, por el derecho al trabajo, por medicinas. Aquí, en Colombia, las marchas pacíficas las infiltraron los aliados de quienes acabaron con Venezuela; ellos están en la calle tratando de quitarnos a nosotros lo que ya les arrrebataron allá: la democracia, las libertades, la Patria".
Qué lástima que en América Latina los conceptos que anteriormente eran parte del radicalismo hoy son familiares a nuestro paisaje y que lo marginal, ahora es algo normal.
Ojalá que las autoridades colombianas logren frenar la violencia y que el veneno del comunismo se espante.
Por cierto, ¿el señor Gustavo Petro en qué andará a todas estas?
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