Caracas.- La Agencia Internacional de la Energía (AIE), en su informe anual sobre el mercado del gas publicado este miércoles, advirtió que la demanda global de gas caerá un 4 % este año por la recesión provocada por el coronavirus y por las condiciones climáticas de “un invierno particularmente suave en el hemisferio norte”, representando el “mayor descenso de la historia del sector hasta ahora”.

Según la institución, el descenso de 150.000 millones de metros cúbicos que se espera en 2020 será el doble del que se produjo tras la crisis financiera en 2008.

“Este retroceso sin precedentes supone una marcada inflexión que tendrá consecuencias duraderas sobre el mercado”, se resaltó en el documento, manifestando que el fenómeno romperá incremento del 1,8% en 2019 y la tendencia alcista del rubro desde el inicio de la década.

Afirman que la pandemia y el cambio climático está afectando de forma sobresaliente a los precios, que se han hundido a “niveles históricamente bajos”. Prevén que esta situación se va a mantener al menos durante el verano y solo deberían empezar a recuperarse cuando comience la próxima temporada de calefacción a finales del 2020 y principios del 2021.

“Un 75 % de la caída del consumo de este año se deberá a los mercados maduros de Europa, Norteamérica y Asia”, prevé la institución.

En Europa, durante los cinco primeros meses del año, el retroceso de la demanda ha sido del 7% respecto al mismo periodo del pasado año, expresando un recorte mayor a los 40.000 millones de metros cúbicos. En Norteamérica, la baja en esos mismo cinco meses ha sido del 2,8%.

Por su parte, en China, el incremento se ha ralentizado al 1,6 % en el primer trimestre.

La AIE calcula que el volumen de gas utilizado para la producción de electricidad en el mundo se reducirá este año un 5%, y eso supondrá la mitad de la disminución de la demanda.

El recorte del 4% para usos residenciales y comerciales representará un 20% y otro tanto la caída del 4% para actividades industriales.

“Para 2021, la agencia espera una recuperación progresiva de forma que la demanda en los mercados maduros volverá a su nivel anterior a la crisis, mientras en las economías emergentes el incremento será más fuerte, aprovechando los bajos precios”.

No obstante, aseveran que el impacto de la crisis de 2020 se dejará sentir en el potencial a “medio plazo”, con “una pérdida de unos 75.000 millones de metros cúbicos” en el incremento que estaba previsto entre 2019 y 2025, cuando se estima que habrá una progresión anual media del 1,5%.

La AIE estima que la mitad de la producción suplementaria en los próximos años saldrá de Oriente Medio y Norteamérica, y que la mitad de la progresión de la demanda procederá de la región asiática, destacando a China y la India.