Luego que el Ejecutivo Nacional anunciara la cuarentena social, toda Venezuela tuvo que aislarse en sus casas para así prevenir el coronavirus.
Sin embargo, luego de varias semanas de encierro, muchos ciudadanos han buscado la oportunidad de salir, pero no para convivir socialmente, sino para disfrutar de los rayos solares o de hacer cortas caminatas para mantenerse activos.
Kary Parra, vecina de la localidad Macarao, reveló a El Universal que, aunque no vive en un edificio, puede disfrutar de la comodidad que ofrece su hogar, “tenemos un patio y una pequeña terraza donde podemos pasar el rato. No es un área común, pero recibimos luz solar”.
Ella menciona que los vecinos también han podido caminar por la zona y se van a la montaña para distraerse. “Por los momentos, ninguna autoridad nos ha prohibido realizar esta actividad”.
Paola Pertuz, quien vive en Sarría, acotó que ha salido a la azotea de su hogar y realiza diversas actividades para mantenerse en forma bajo el sol. “Las áreas verdes de mi urbanización son usadas, muy pocas, pero se puede”.
No todos poseen el acceso a las áreas
A pesar que en algunos edificios se puede ir a la azotea o a un espacio verde, hay otros donde clausuraron estas actividades para todos los vecinos.
“Me siento mal es por mi hermano, sus hijos no han salido desde que empezó la cuarentena”, revela Pertuz. “Todos los días dicen que quieren salir, y tienen áreas verdes, hasta un parque, pero los del condominio los acusan si salen”.
También acotó que solo permiten salir a aquellos que tienen mascotas y los que compran comida para el hogar.
La vecina de Chacao, Denisse Corrales, manifestó que, aunque hay espacios comunes para el esparcimiento, la comunidad logró un acuerdo de no utilizarlos para evitar posibles contagios del Covid-19.
“Solo tenemos oportunidad de salir para regar las plantas, y ahí podemos durar hasta 15 minutos para recibir un poco de sol”, dice Corrales. “Ningún vecino quiere tener ningún tipo de contacto”.
El sol como privilegio
La señora Evelyn Ramírez, residenciada en La Candelaria, reveló que, aunque en su edificio no se puede estar en las áreas comunes para tomar el sol, dice que posee una pequeña terraza para disfrutarlo.
“La terraza es la única que me aporta esta vitamina y así evito salir para prevenir el contagio”.
Sin embargo, no todos los apartamentos poseen esta terraza y los vecinos que no tienen, hacen un esfuerzo para tomar sol cerca de la entrada del edificio.
Así como Ramírez, muchos apartamentos tienen una terraza donde se puede disfrutar y hacer un poco de ejercicio, así como en algunos edificios antiguos mantienen la lavandería en la azotea, y así muchos pueden salir y recrearse, al menos, 10 minutos.
Por ahora, la cuarentena social permanece y se debe limitar cualquier contacto al momento de salir.
Sin embargo, luego de varias semanas de encierro, muchos ciudadanos han buscado la oportunidad de salir, pero no para convivir socialmente, sino para disfrutar de los rayos solares o de hacer cortas caminatas para mantenerse activos.
Kary Parra, vecina de la localidad Macarao, reveló a El Universal que, aunque no vive en un edificio, puede disfrutar de la comodidad que ofrece su hogar, “tenemos un patio y una pequeña terraza donde podemos pasar el rato. No es un área común, pero recibimos luz solar”.
Ella menciona que los vecinos también han podido caminar por la zona y se van a la montaña para distraerse. “Por los momentos, ninguna autoridad nos ha prohibido realizar esta actividad”.
Paola Pertuz, quien vive en Sarría, acotó que ha salido a la azotea de su hogar y realiza diversas actividades para mantenerse en forma bajo el sol. “Las áreas verdes de mi urbanización son usadas, muy pocas, pero se puede”.
No todos poseen el acceso a las áreas
A pesar que en algunos edificios se puede ir a la azotea o a un espacio verde, hay otros donde clausuraron estas actividades para todos los vecinos.
“Me siento mal es por mi hermano, sus hijos no han salido desde que empezó la cuarentena”, revela Pertuz. “Todos los días dicen que quieren salir, y tienen áreas verdes, hasta un parque, pero los del condominio los acusan si salen”.
También acotó que solo permiten salir a aquellos que tienen mascotas y los que compran comida para el hogar.
La vecina de Chacao, Denisse Corrales, manifestó que, aunque hay espacios comunes para el esparcimiento, la comunidad logró un acuerdo de no utilizarlos para evitar posibles contagios del Covid-19.
“Solo tenemos oportunidad de salir para regar las plantas, y ahí podemos durar hasta 15 minutos para recibir un poco de sol”, dice Corrales. “Ningún vecino quiere tener ningún tipo de contacto”.
El sol como privilegio
La señora Evelyn Ramírez, residenciada en La Candelaria, reveló que, aunque en su edificio no se puede estar en las áreas comunes para tomar el sol, dice que posee una pequeña terraza para disfrutarlo.
“La terraza es la única que me aporta esta vitamina y así evito salir para prevenir el contagio”.
Sin embargo, no todos los apartamentos poseen esta terraza y los vecinos que no tienen, hacen un esfuerzo para tomar sol cerca de la entrada del edificio.
Así como Ramírez, muchos apartamentos tienen una terraza donde se puede disfrutar y hacer un poco de ejercicio, así como en algunos edificios antiguos mantienen la lavandería en la azotea, y así muchos pueden salir y recrearse, al menos, 10 minutos.
Por ahora, la cuarentena social permanece y se debe limitar cualquier contacto al momento de salir.
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