Negocios son afectados por apagones en Caracas, según denuncian los comerciantes.
Debido a los apagones y bajones de luz que se suscitan en el centro de la ciudad, los comercios de comidas como: restaurantes, panaderías y pastelerías son los más perjudicados por los constante problemas eléctricos.
De acuerdo a José Cáceres, trabajador de uno de los locales más famosos de la parroquia La Candelaria, Restaurante “La Cita”, comentó que “los artefactos eléctricos son los más perjudicados con los bajones de luz”.
Los comerciantes encuestados expresaron que “la peor pérdida es la material, ya que cuesta recuperar los aparatos eléctricos”.
Entretanto, las frecuentes fallas del servicio eléctrico en el centro afecta directamente la baja en las ventas de los productos en los negocios comerciales. Otro comerciante afectado es Diamantino Araujo, dueño y gerente de una panadería, mencionó qué debido a los apagones una de las neveras de su negocio se dañó, el gerente señaló que “solo comprar el compresor cuesta 500 dólares”.
Asimismo, aseveró que “nadie cubre con los gastos de los daños causado por los problemas de electricidad”.
Los comerciantes señalaron “no contar con plantas eléctricas para solventar la situación”. Las tiendas de ropa y calzados también son perjudicadas por la pérdidas de clientes y baja en las ventas de sus productos, sin embargo, estas no son tan afectadas como los locales de comida.
Debido a los apagones y bajones de luz que se suscitan en el centro de la ciudad, los comercios de comidas como: restaurantes, panaderías y pastelerías son los más perjudicados por los constante problemas eléctricos.
De acuerdo a José Cáceres, trabajador de uno de los locales más famosos de la parroquia La Candelaria, Restaurante “La Cita”, comentó que “los artefactos eléctricos son los más perjudicados con los bajones de luz”.
Los comerciantes encuestados expresaron que “la peor pérdida es la material, ya que cuesta recuperar los aparatos eléctricos”.
Entretanto, las frecuentes fallas del servicio eléctrico en el centro afecta directamente la baja en las ventas de los productos en los negocios comerciales. Otro comerciante afectado es Diamantino Araujo, dueño y gerente de una panadería, mencionó qué debido a los apagones una de las neveras de su negocio se dañó, el gerente señaló que “solo comprar el compresor cuesta 500 dólares”.
Asimismo, aseveró que “nadie cubre con los gastos de los daños causado por los problemas de electricidad”.
Los comerciantes señalaron “no contar con plantas eléctricas para solventar la situación”. Las tiendas de ropa y calzados también son perjudicadas por la pérdidas de clientes y baja en las ventas de sus productos, sin embargo, estas no son tan afectadas como los locales de comida.
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