Lara.- “Yo no sé dónde hacen las encuestas ni a quien entrevistan porque a mí en 36 años de vida nunca me han preguntado nada, ni siquiera hemos visto las tales encuestadoras por estos barrios”, es la respuesta de Adrián un obrero de la construcción que ayer
reclamaba en el Cují, barrio al norte de Barquisimeto, por condiciones de vida dignas.
reclamaba en el Cují, barrio al norte de Barquisimeto, por condiciones de vida dignas.
Mientras tanto en la parroquia Juan de Villegas, al oeste de la misma ciudad, la más poblada del estado Lara, más de 300 mil habitantes se ven afectados por la falta de servicios de luz, agua, gas, drenajes, comida y comunicaciones.
Lo reflejan las protestas que esta semana movilizaron a más de 12 comunidades del sector, entre ellas La Carucieña, Los Cerrajones, Garabatal, Agua Viva El Roble, 5 de Julio, La Lucha, Urbanización José Ángel de Álamo, Brisas del Turbio, Antonio
Ricaurte, Villa Productiva.
Ricaurte, Villa Productiva.
“A los políticos solo les interesa las elecciones y a nosotros tener comida, agua, luz, gas y salud” dice uno de los dirigentes sociales de la zona, Alcides Pérez quien junto a las comunidades lleva casi dos meses luchando con sus únicas armas, su voz y sus pancartas.
Josefina Salazar, habitante de la Carucieña sector 3 explica que lleva más de 8 meses sin agua, ella como persona de la tercera edad no pude estar cargando todos y caminando kilómetros para poder tener agua.
Lo mismo repite Margot Toro quien sostiene que sin agua no se puede cumplir con los protocolos que exigen para la pandemia. También denunció los problemas de las suspensiones del servicio de electricidad que ya van por más de 8 horas diarias, lo que los obliga a acostarse muchas veces sin comer ya que como no hay gas, tienen que cocinar en cocinillas eléctricas pero la luz se va a media mañana y solo regresa a las 6 de la tarde y luego se vuelve a ir a las 7 hasta la 1 o 2 de la madrugada.
En otros sectores de la parroquia como Loma de León se repiten los problemas, las denuncias que según dicen los vecinos traen problemas de insalubridad, enfermedades de la piel y gastrointestinales, por la cantidad de moscas, alimañas y todo tipo de insectos además de los roedores que se han incrementado por las condiciones de cloacas y falta de agua para limpiar las viviendas.
Las comunidades aseguran que no van a cesar en su protesta, no pueden seguir en esas condiciones insalubres de vida, a lo que se suma la falta de medicamentos o el difícil acceso por sus altos costos, la alimentación deficiente debido a que los salarios no alcanzan, a la vez que denuncian la calidad de los productos que distribuyen en las bolsas Clap que a veces vienen en mal estado.
Nosotros – argumenta Pérez- queremos que nos respeten nuestros derechos, claramente establecidos en la Constitución Bolivariana de Venezuela, los cuales se están violando en cada uno de sus artículos referentes a los derechos de la población y su protección como ciudadanos.
Queremos recuperar nuestra vida, y que nos traten con dignidad, manifestó. Mientras tanto nos mantendremos en protesta pacífica, hasta que alguien nos escuche.
Se puede resaltar que en el municipio Iribarren se encuentra la parroquia Juan de Villegas, donde residen 344.196 habitantes, lo que representa el 34,5% de la población de dicho municipio.
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