¿Cómo liderar cuando el mapa se redibuja mientras caminas? Esta es la pregunta que obsesiona a los ejecutivos en la era VICA (Volatilidad, Incertidumbre, Complejidad, Ambigüedad), un concepto nacido en el U.S. Army War College durante los ‘90 y que hoy la Harvard Business School considera esencial para el liderazgo empresarial.

El entorno VICA no es una moda: es una realidad psicológica. La volatilidad activa nuestra amígdala, generando respuestas instintivas de miedo. Como explica el neurocientífico David Rock, "el cerebro humano prefiere la certeza equivocada a la incertidumbre correcta". Esto explica por qué, según McKinsey, el 70% de las iniciativas de transformación digital fracasan: los líderes caen en la parálisis o en soluciones cortoplacistas. La antidote, como demostró Mercadona en España durante la pandemia, es anclar la organización en valores inquebrantables mientras se pivotan operaciones.

En América Latina, el modelo VICA está redefiniendo el éxito empresarial. Bancolombia implementó "gabinetes de crisis ágiles" que toman decisiones en 48 horas, reduciendo en un 40% el tiempo de respuesta a fluctuaciones del mercado. Argentina's Globant adoptó el "error rápido": cada fracaso se documenta en una wiki interna, acelerando el aprendizaje organizacional. Chile's Cencosud enfrentó la complejidad de las cadenas de suministro mediante IA predictiva, logrando un 92% de precisión en sus pronósticos.

Las estrategias clave emergen claramente. Primero, la "visión líquida" propuesta por el profesor del MIT Otto Scharmer: metas claras con caminos flexibles. Segundo, la escucha radical practicada por FEMSA en México, donde los repartidores aportan el 30% de las ideas de innovación. Tercero, la creación de "equipos antifrágiles", como los de Mercado Libre, que combinan veteranos con millennials para balancear experiencia y adaptabilidad.

El impacto es contundente: las empresas con liderazgo VICA tienen un 5,3 veces mayor retorno sobre capital (Deloitte, 2023). Pero el verdadero valor es cultural. Como señala la CEO de Natura, "en la ambigüedad, la brújula ética reemplaza al manual de procedimientos". Las organizaciones que dominan el VICA no solo sobreviven al caos; lo usan como trampolín, transformando amenazas en ventajas competitivas. Un liderazgo efectivo en VICA mejora la innovación, fortalece la cultura y aumenta la competitividad. Liderar en contextos VICA es una necesidad estratégica.

¿Estamos preparados para liderar organizaciones donde la disrupción es el único statu quo? La pregunta no es retórica: en el mundo VICA, la adaptabilidad dejó de ser virtud para convertirse en requisito de supervivencia. Como advirtió Charles Darwin, no sobrevive el más fuerte, sino el más adaptable. En su empresa, ¿el ADN directivo está mutando a la velocidad del mercado?

Los gabinetes de crisis ágiles dan la talla. CORTESÍA