Pedro Rojas
EL UNIVERSAL
El documental Ozzie, la historia de Oswaldo Cisneros Fajardo es una producción cinematográfica de Cinesa perteneciente a la colección Constructores de un País, que ofrece una perspectiva cercana y personal de la vida del empresario y su impacto en Venezuela.

Se estrena tres años después de su fallecimiento y plantea muchas reflexiones acerca de los procesos creativos para proyectar empresas y, en definitiva, acerca de todo un país a través de sus propios líderes.

Bajo la dirección de Maurizio Liberatoscioli, con la asesoría cinematográfica de Carlos Oteyza y la producción ejecutiva de José Ignacio Oteyza y Daniela Nieves, se basa en una meticulosa recopilación de fotografías, documentos, reportajes y, sobre todo, testimonios recogidos durante los últimos 12 años de la vida de Oswaldo Cisneros.

Estos testimonios provienen tanto del propio Cisneros como de sus hijas Marisa Cisneros de Rizzon, Mariela Cisneros de Mestre y Claudia Cisneros de Capriles, de su exesposa y amiga Ella Fontanals-Cisneros, así como de familiares, amigos y colaboradores cercanos.

A través de esta cuidadosa compilación, Liberatoscioli revela la faceta de Cisneros como hombre de familia arraigado en sus creencias y valores y una visión íntima del empresario, destacando su legado e influencia en el contexto venezolano, con la narración del actor y locutor Sócrates Serrano.

Mariela Cisneros de Mestre destaca el valor de la pieza como referente para los jóvenes, estimando que “son siempre necesarios, y el medio audiovisual es el ideal para llevar esta información a las distintas generaciones”.

Transformado por el tiempo
Cisneros de Mestre explica que empezó “hace más de 12 años con el proyecto de escribir un libro sobre Pepsi-Cola y Hit de Venezuela, que con el tiempo se fue transformando en un documental sobre la vida empresarial de mi padre, Oswaldo Cisneros Fajardo”.

Destaca que su idea “era crear un material que sirviera para futuras generaciones como referencia empresarial en el país. Junto a una amiga escritora, Rosaura Rodríguez, ya fallecida, le hicimos una serie de entrevistas donde él mismo cuenta su historia, y en esos años me aboqué a buscar materiales como fotos y documentos”.

En 2021 se acercó a Cinesa, la afamada empresa de audiovisuales venezolana, de larga trayectoria y creaciones, y enseguida, explica, “mostraron entusiasmo por el proyecto. Comenzó a elaborarse en marzo de 2022”.

-¿Cuál cree que fue el legado más significativo de su padre y que trasciende al contexto en el que vivió y la Venezuela que ayudó a impulsar empresarialmente?
-Mis hermanas, Marisa y Claudia, así como yo, pensamos que el legado más significativo de mi papá fue cómo ejemplarizó la dedicación al trabajo. Se caracterizó por su humildad y sencillez. Tocó a muchas personas y fungió de mentor tanto en lo personal como en lo laboral.

-¿Qué aspectos de la vida de su padre se destacan en el documental y por qué creen que son importantes de resaltar en el presente?
-Aunque el documental muestra su historia personal, se enfatizó en su vida empresarial y en las innovaciones de negocio en las distintas áreas empresariales como consumo masivo, telefonía móvil, construcción, agricultura, entre otras tantas. Creemos que documentar este tipo de personajes ayuda a pintar, con ejemplos reales, las posibilidades de construir con paciencia y dedicación empresas que perduran a través de los años, trascendiendo las políticas y las adversidades.

Mariela Cisneros de Mestre explica que hubo dos etapas en este proceso creativo para consolidar el documental: “Una con mi padre, en vida, y una después de su fallecimiento. Cuando reviví junto a él sus historias fue un proceso de conocerlo más como adulto en vez de con ojos de hija. Allí empecé a entenderlo más como persona en vez de como padre. Una vez fallecido y junto al equipo de Cinesa, Maurizio Liberatoscioli, Daniela, Adriana, Karen y más tarde, Carlos Oteiza, comencé a revivir los momentos con nostalgia por la ausencia tan sentida de él”.

Ideas sobre el país creciendo y desarrollándose
Para Mariela Cisneros de Mestre el mensaje principal que presenta esta pieza es que “para construir hay que tener constancia, dedicación, valores y capacidad para levantarte cuando las cosas no marchan bien”.

Indica que su padre fue un hombre “con un gran amor por Venezuela y lo demostró con sus años de dedicación al país; tenía hasta programas de gobierno escritos en distintas épocas, con ideas de cómo veía al país creciendo y desarrollándose”.

Dice que el mayor reto a la hora de crear un documental “es no tener una visión sesgada sino objetiva sobre el personaje”. Cuenta que “una vez que entregué el material a Cinesa, junto con mi visión para el documental, fueron ellos los que llevaron a cabo toda la investigación, confirmaron documentos, realizaron las entrevistas individuales y escribieron la historia. Creo que de esta forma se logró una visión muy acertada de nuestro padre”.

Ozzie, como lo llamaban sus amigos, fue un líder venezolano, y aunque hoy día se puede tener la información de todo el mundo rápidamente, siempre es importante tener referentes locales, explica Cisneros de Mestre. “Los líderes locales entienden las dinámicas de los países donde se desenvuelven, entienden a su gente, la cultura, la política y las necesidades de la sociedad”.

Precisa que inicialmente para aquellos que lo vean podrán “conocer o recordar momentos históricos del empresariado nacional. Hay referencias a momentos específicos de la economía venezolana, hallazgos empresariales y ejemplos de estrategias de negocio”.


Maurizio Liberatoscioli y Sócrates Serrano. CORTESÍA


El documental revela un hombre con un gran amor por Venezuela. CORTESÍA