La mañana del 12 de marzo de 2004, la ciudad de Fresno, California, fue sacudida por un evento que dejaría una marca indeleble en la comunidad.

Lo que se había iniciado como una disputa familiar por la custodia de varios niños terminó como uno de los casos de asesinato múltiple más brutales en la historia de Estados Unidos. Este acontecimiento tendría como protagonista a un sujeto que sería apodado “el Vampiro de Fresno”.

Esta historia se inició el 22 de agosto de 1946, en el estado de Kansas, cuando nació Marcus Delon Wesson en el seno de una familia extremadamente disfuncional, hijo de un padre alcohólico y violento abusador sexual y de una madre fanática religiosa, miembro de la Iglesia Adventista del Séptimo Día.

Durante años Marcus y sus hermanos sufrieron los abusos de su padre y el estricto control religioso de su madre. En 1960 se mudaron a California. Entre 1966 y 1968 Marcus estuvo en el Ejército, asignado a la guerra de Vietnam. Al poco tiempo de ser dado de baja, comenzó a vivir con Rosmary Solorio, una mujer mucho mayor que él y madre de ocho hijos, más uno suyo que nació en 1971.

En 1974 Marcus comenzó a abusar de Elizabeth, la hija de ocho años de Solorio, con quien se casaría al cumplir 14 años. Ella le dio diez hijos. Ya en esa época había comenzado a crear una mitología religiosa y escribió a mano una biblia en la que Cristo era un vampiro y él era Dios.

Poco tiempo más tarde una de las hermanas menores de Elizabeth le dejó sus siete hijos, alegando problemas de drogas. Marcus los adoctrinó a todos; e hizo trabajar a los mayores mientras abusaba de los menores y los “educaba”.

El "plan de estudios" de Wesson implicaba sexo con las niñas de ocho o nueve años, quienes tenían prohibido hablar con sus hermanos o con su madre. Wesson violó a dos hijas y a tres sobrinas, quienes quedaron embarazadas.

Wesson había anunciado que se llevaría a su familia a Washington, pero el 12 de marzo de 2004 varios familiares intentaron impedir que eso ocurriera, la policía fue convocada para atender la disputa y todo se convirtió en una situación de rehenes que se extendió por nueve horas y culminó cuando Wesson salió con la ropa ensangrentada.

Al entrar a la casa, la policía descubrió nueve cadáveres, dos de las hijas de Wesson y siete de sus hijos habían recibido un disparo mortal en un ojo. Los hijos de Wesson sobrevivieron a la masacre porque no estaban presentes.

Wesson fue enjuiciado y el 17 de junio de 2005 declarado culpable de nueve cargos de asesinato en primer grado y 14 cargos de violación forzada y abuso sexual de siete de sus hijas y sobrinas.

“El Vampiro de Fresno” fue sentenciado a muerte el 27 de junio de 2005 y actualmente se encuentra en la prisión estatal de San Quentin.