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Un funeral solemne y emotivo

La despedida del duque de Edimburgo revistió un intimidad muy especial, un ceremonial que recogió la importancia de la institución monárquica para el Reino Unido de la Gran Bretaña

  • Diario El Universal

17/04/2021 10:56 am

El féretro del príncipe Felipe, esposo de la reina Isabel II, fue inhumado este sábado 17 de abril en la cripta real de la capilla San Jorge en Windsor, residencia real a unos 50 km al oeste de Londres, donde se celebraron sus exequias.

Los restos del duque de Edimburgo permanecerán allí hasta que la monarca se reúna con él a su muerte, cuando la pareja se traslade entonces  entonces en la capilla del Memorial del rey Jorge VI, padre de Isabel II.

El Land Rover con el féretro llegó a la escalinata oeste de la capilla de San Jorge, donde descansa  en la bóveda real, el mismo lugar en el que también estuvo enterrada la madre del duque de Edimburgo. 



Camilla, duquesa de Cornwall; y el príncipe Carlos  AFP

El féretro de Felipe estuvo cubiertos por su estandarte, además se colocaron su espada, su gorra de la Armada y una corona de flores, fue trasladado de la capilla privada de la familia real a otro salón del castillo, donde precisamente se casaron Harry y Meghan. El decano de Windsor, David Conner, pronunció una oración antes de trasladarse a la capilla San Jorge.
 
La princesa Ana y su esposo Sir Timothy Laurence 

Los representantes de las Fuerzas Armadas británicas tomaron posiciones en el patio central junto a las dependencias reales del castillo y en las escaleras que llevan a la capilla.  Los invitados que no participan en la procesión salieron hacia la capilla.

El Land Rover especial que el príncipe Felipe ayudó a diseñar durante más de 16 años entró en el patio del castillo y la banda militar comenzó a tocar.. Los portadores levantaron el ataúd y salió del castillo. Afuera lo recibieron los miembros de la familia real para la procesión. Tras un saludo militar, se colocó en el vehículo de color verde militar.
 
Catherine, duquesa de Cambridge 

Se esperaron unos segundo y apareció la Reina con una dama de compañía en un Bentley oficial y se unió a la retaguardia del cortejo mientras sonaba el himno nacional, God Save the Queen.

El  cortejo fúnebre, con una duración prevista de ocho minutos, se acompañó con salvas de honor y el tañido de una de las campanas del castillo. Participaron en recorrido los hijos de la reina y Felipe, Carlos (heredero al trono), Ana, Andrés y Eduardo, y algunos de sus nietos, William, Harry y Peter Phillips. También estaban presentes Timothy Laurence, esposo de Ana; y el sobrino de la monarca, David Linley. El más joven del cortejo fue James, vizconde de Severn, nieto del duque e hijo del príncipe Eduardo y su esposa Sophia. Lucieron sus medalla militares sobre sus trajes de civiles 

Príncipe William, duque de Cambridge y su hermano Harry, duque de Sussex

Al llegar la procesión l a la capilla San Jorge se guardó un minuto de silencio en todo el Reino Unido. El arzobispo de Canterbury, Justin Welby, líder espiritual de los anglicanos, y el decano de Windsor recibieron el féretro en la capilla.

Al término de la ceremonia religiosa, el duque fue descendido en privado a la cripta real de la capilla para ser inhumado.
 
Harry, duque de Sussex en la iglesia

Los cornetines tocaron The Last Post, tema utilizado en los funerales militares británicos, y Action Stations, la señal que llama a los marineros a sus puestos, por petición expresa del príncipe Felipe, que sirvió en la Armada Real durante la Segunda Guerra Mundial.

El programa musical que acompañó a este funeral fue seleccionado íntegramente por el duque de Edimburgo. La dirección del coro estuvo a cargo de  James Vivian, mientras que el órgano lo interpretó Luke Bond. Entre las composiciones que se escucharon estuvieron Schmücke dich, o liebe Seele, de Johann Sebastian Bach; Adagio espressivo, de Sir William Harris; Salix, de Percy Whitlock; Berceuse, de Louis Vierne y Rhosymedre, de Ralph Vaughan Williams.

El fin de la ceremonia fue la bendición impartida por el arzobispo de Canterbury y sonó el himno nacional. Después los asistentes abandonaron la capilla por el pórtico de Galileo.

Las miradas estaban puestas en Harry y William por su distanciamiento, sin embargo, los dos salieron charlando al término de la ceremonia, acompañados por la esposa Catherina, en una posible señal de reconciliación.


Justin Welby, arzobispo de Canterbury  AFP

La monarca publicó hoy sábado una conmovedora fotografía personal donde ella y su esposo aparecen relajados y sonrientes en 2003 en el Parque Nacional de Cairngorms, Escocia. En las redes sociales de la familia real también se difundieron imágenes de momentos clave del matrimonio. 


La princesa Eugenia y su esposo Jack Brooksbank


Los Royal Marines durante su interpretación


Penny Brabourne, condesa de Mountbatten 


La reina Isabel II en la capilla


El féretro de Felipe de Edimburgo al entrar a su última morada
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