El día comenzó temprano para los reyes de España. En plena madrugada se dirigieron a Mercamadrid, el centro de distribución de alimentos frescos más grande del país. Llegaron con guantes y mascarillas pero compartieron con los trabajadores, cuya labor ha sido indispensable para que no hubiese escasez de alimentos.
Tanto Felipe VI como Letizia saludaron con el codo, conversaron con muchos de los vendedores y se tomaron fotos con ellos. El recorrido duró casi cuatro horas. A la llegada muchos gritaron Viva el Rey y a su despedida sonaron los aplausos para la pareja representante de la Casa real, aunque el monarca ha dicho que los aplausos tienen que ser para quienes allí trabajan.
Los reyes de España junto a uno de los vendedores de frutas FOTOS AFP
Entre las personas con las que conversaron los reyes estuvo el chef Chema de Isidro, fundador de una ONG que reúne a gente de la gastronomía y la hostelería, llamada Gastronomía Solidaria y cuyo esfuerzo se ha centrado en brindar alimentación a estos trabajadores cuya labor es indispensable, así como también a personas que se encuentran en estado de vulnerabilidad.
La agenda de Felipe VI y de Letizia ha estado bastante movida desde el mismo momento en que se decretó el estado de alarma. Han asistido a numerosas reuniones a través de teleconferencias con representantes de organismos encargados de la salud pública e igualmente han visitado otras instituciones para conocer de cerca la situación económica.
La reina consorte ha optado por el negro como color básico pues llevó pantalones y una franela negros que acompañó con una chaqueta estampada a cuadros color vino tinto y zapatos estilo blutcher también en negro.
El saludo de distancia
Letizia y el saludo a otro de los vendedores de pescado
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