La mañana se presentó soleada aunque algunas nubes presagiaron una leve lluvia que no impidió que las seguidoras de Ana Ascanio y de los bolsos y marroquinería Chesty acudieran a la cita que tuvo lugar en el restaurante 1956 ubicado en el teleférico de El Ávila, Caracas, en cuyas instalaciones se organizó un trunk show a beneficio de la Asociación Civil Infantil Ronald McDonald de Venezuela, una residencia donde los niños pueden hospedarse gratuitamente junto a su familia mientras reciben tratamiento médico, además de brindar orientación, apoyo, cuidados e información a los representantes  sobre la enfermedad que padecen los pequeños, al mismo tiempo que se integran con otros padres o representantes para compartir su experiencia de lucha por la salud de un hijo. Un porcentaje de las ventas de ese día se destinaron a esta iniciativa.

Ana Ascanio Couture presentó en esta oportunidad su ya conocida línea de camisas y blusas femeninas a la que se han sumado algunos vestidos sencillos de corte camisero para ir a la oficina y para esas salidas informales. En las blusas destacaron las confeccionadas con sedas y chifones estampados, una de las tendencias del momento.También se vieron piezas donde el bordado y los encajes le dan un toque romántico.

Chesty mostró la colección Grato, inspirada en Italia pues utiliza una paleta de colores propios de la Toscana y Capri. Estaban los bolsos de tonos metalizados como el azul eléctrico que recuerda el cielo de Capri;  el fucsia, sustraido de las trinitarias que tiñen las paredes blancas de las casas, el amarillo del sol o los de tonalidades arena de la Toscana. En cuanto a la confección, cada pieza está realizada a mano por un calificado equipo de talabarteros.

Como en otras ocasiones se sumó a esta idea Calzados Ezio, otra empresa venezolana dedicada al diseño y confección de calzado, con 65 años en el mercado de la moda. Esta vez se seleccionaron sandalias, zapatillas, mocasines, mules y sneaker.

Un desfile permitió conocer más sobre los detalles de las colecciones, tales como colores, cortes y diseño. Los invitados disfrutaron de un brindis con cocteles y pasapalos del local, además de la terraza donde se respira el aire fresco de El Ávila y se disfruta de una vista espectacular de Caracas.

La recompensa fue que se pudo dar un interesante aporte de la Casa Ronald McDonald que permitirá que su funcionamiento sea satisfactorio y pueda seguir beneficiando a tantos niños que allí se hospedan cargados de esperanza.

 Erika Diéguez, Robert Veiga y  Kotusa Reigosa de Veiga

Silvia Yánez, Norma Pagés y Annemarie Finlay