Caracas.- Medios de comunicación locales, agencias internacionales, portales y ONG reiteran en sus reportes lo que catalogan como “crítica situación” la que se viene presentando en la frontera con Colombia desde el inicio de la cuarentena que, con la finalidad de detener el coronavirus, fue decretada por el Gobierno nacional para todo el país.
De acuerdo con las informaciones provenientes, especialmente desde San Antonio, un grupo de alrededor de mil migrantes venezolanos de una cifra mayor que retornaron al país por la frontera con Colombia, permanecen en el terminal de esta población tachirense dependiendo de la atención que puedan brindarles las autoridades locales en cuanto a alojamiento, servicios sanitarios y alimentación en el tiempo que deba durar el período de cuarentena para cada persona.
La “avalancha”
En uno de los más recientes informes de AFP sobre la movilización de venezolanos que retornan a su país desde la vecina nación, la agencia cita declaraciones del llamado “protector del Táchira”, Freddy Bernal, quien habría asegurado que “en las últimas 48 horas, después que se decretó la cuarentena para todo el que entre desde Colombia, han ingresado 2.135 venezolanos".
Advirtió Bernal, según la agencia, que las autoridades no están en capacidad de atender “esa avalancha humana” conformada por venezolanos que, provenientes tanto de Colombia como de otros países suramericanos de acogida se dirigen a ese punto de la frontera.
Fundaredes denuncia
Voceros de la ONG Fundaredes, de activa participación durante los últimos tiempos en la denuncia de situaciones irregularidades relacionadas, por una parte a la presunta presencia de grupos delincuenciales colombianos armados en gran parte de los estados fronterizos venezolanos, y por la otra a las precarias condiciones de movilización de connacionales que emigran del país, se refieren esta vez a los padecimientos que soportan quienes se someten a la cuarentena obligada en San Antonio.
Oswaldo Cáceres, integrante de la mencionada ONG, describió para El Universal las condiciones en las que se desenvuelve la cuarentena de los migrantes en San Antonio, quienes además de verse afectados como el resto de la población tachirense a los constantes cortes de electricidad, carecen de la debida atención por parte de las autoridades.
“La crítica situación que soportan los refugiados en San Antonio se agrava por la falta de agua, otro servicios esenciales de salubridad y a la incomunicación a las que son sometidas familias enteras, de las cuales conozco dos casos en particular, así como al precario acceso a la alimentación”, expresó Cáceres, y agregó que pese a las condiciones económicas en que se encuentra la mayoría y a las dificultades de disponer de dinero en efectivo, los alimentos a los que pudieran acceder se expenden a “precios altamente especulativos, sin que las autoridades ejerzan control” sobre el particular.
Por otra parte, corresponsales de estaciones televisoras acreditadas en la región, han mostrado testimonios de personas que exigen apoyo gubernamental para trasladarse, desde los lugares del Táchira en los que se encuentran recluidos, hasta las ciudades donde residen, y que pese a las promesas del “protector” estas no han sido cumplidas.
A todo ello se suma el anuncio sobre la decisión de trabajadores del Hospital Samuel Darío Maldonado, en el municipio Bolívar, de poner sus cargos a la orden de la gobernadora del Táchira, Laidy Gómez, por no contar el centro con los insumos de bioseguridad y limpieza necesarios para enfrentar el coronavirus con un servicio de calidad tanto a los miembros de esa comunidad como para los retornados desde el exterior.
Atribuyen toma de colegio al ELN
Este jueves el director de Fundaredes, Javier Tarazona, denunció que en la tarde del pasado miércoles, ingresaron al colegio Santa Mariana de Jesús, en Capacho, sujetos con armas largas con el propósito de hacer uso de dichas instalaciones, según información divulgada este jueves por el portal El Pitazo.
“Los vecinos hicieron acto de presencia para defender la instalación del colegio que allí funciona para los niños de la zona. Hombres en cuatro camionetas se hicieron presentes, armados, miembros del Ejército de Liberación Nacional. Esta guerrilla que por cierto lleva meses extorsionando e intimidando a la población”, dijo Tarazona, según la versión periodística.
Por su parte, la gobernadora del Táchira, Laidy Gómez, publicó en Twitter que se trataba de colectivos, quienes tomaron el colegio. “Colectivos armados ni grupos subversivos al margen de la ley pueden disponer de instituciones educativas para cuarentena de venezolanos que retornan por la frontera, amenazan y confrontan al pueblo angustiado. Exhorto a las FAN a brindar garantías inmediatas en Capacho”, posteó.
De acuerdo con las informaciones provenientes, especialmente desde San Antonio, un grupo de alrededor de mil migrantes venezolanos de una cifra mayor que retornaron al país por la frontera con Colombia, permanecen en el terminal de esta población tachirense dependiendo de la atención que puedan brindarles las autoridades locales en cuanto a alojamiento, servicios sanitarios y alimentación en el tiempo que deba durar el período de cuarentena para cada persona.
La “avalancha”
En uno de los más recientes informes de AFP sobre la movilización de venezolanos que retornan a su país desde la vecina nación, la agencia cita declaraciones del llamado “protector del Táchira”, Freddy Bernal, quien habría asegurado que “en las últimas 48 horas, después que se decretó la cuarentena para todo el que entre desde Colombia, han ingresado 2.135 venezolanos".
Advirtió Bernal, según la agencia, que las autoridades no están en capacidad de atender “esa avalancha humana” conformada por venezolanos que, provenientes tanto de Colombia como de otros países suramericanos de acogida se dirigen a ese punto de la frontera.
Fundaredes denuncia
Voceros de la ONG Fundaredes, de activa participación durante los últimos tiempos en la denuncia de situaciones irregularidades relacionadas, por una parte a la presunta presencia de grupos delincuenciales colombianos armados en gran parte de los estados fronterizos venezolanos, y por la otra a las precarias condiciones de movilización de connacionales que emigran del país, se refieren esta vez a los padecimientos que soportan quienes se someten a la cuarentena obligada en San Antonio.
Oswaldo Cáceres, integrante de la mencionada ONG, describió para El Universal las condiciones en las que se desenvuelve la cuarentena de los migrantes en San Antonio, quienes además de verse afectados como el resto de la población tachirense a los constantes cortes de electricidad, carecen de la debida atención por parte de las autoridades.
“La crítica situación que soportan los refugiados en San Antonio se agrava por la falta de agua, otro servicios esenciales de salubridad y a la incomunicación a las que son sometidas familias enteras, de las cuales conozco dos casos en particular, así como al precario acceso a la alimentación”, expresó Cáceres, y agregó que pese a las condiciones económicas en que se encuentra la mayoría y a las dificultades de disponer de dinero en efectivo, los alimentos a los que pudieran acceder se expenden a “precios altamente especulativos, sin que las autoridades ejerzan control” sobre el particular.
Por otra parte, corresponsales de estaciones televisoras acreditadas en la región, han mostrado testimonios de personas que exigen apoyo gubernamental para trasladarse, desde los lugares del Táchira en los que se encuentran recluidos, hasta las ciudades donde residen, y que pese a las promesas del “protector” estas no han sido cumplidas.
A todo ello se suma el anuncio sobre la decisión de trabajadores del Hospital Samuel Darío Maldonado, en el municipio Bolívar, de poner sus cargos a la orden de la gobernadora del Táchira, Laidy Gómez, por no contar el centro con los insumos de bioseguridad y limpieza necesarios para enfrentar el coronavirus con un servicio de calidad tanto a los miembros de esa comunidad como para los retornados desde el exterior.
Atribuyen toma de colegio al ELN
Este jueves el director de Fundaredes, Javier Tarazona, denunció que en la tarde del pasado miércoles, ingresaron al colegio Santa Mariana de Jesús, en Capacho, sujetos con armas largas con el propósito de hacer uso de dichas instalaciones, según información divulgada este jueves por el portal El Pitazo.
“Los vecinos hicieron acto de presencia para defender la instalación del colegio que allí funciona para los niños de la zona. Hombres en cuatro camionetas se hicieron presentes, armados, miembros del Ejército de Liberación Nacional. Esta guerrilla que por cierto lleva meses extorsionando e intimidando a la población”, dijo Tarazona, según la versión periodística.
Por su parte, la gobernadora del Táchira, Laidy Gómez, publicó en Twitter que se trataba de colectivos, quienes tomaron el colegio. “Colectivos armados ni grupos subversivos al margen de la ley pueden disponer de instituciones educativas para cuarentena de venezolanos que retornan por la frontera, amenazan y confrontan al pueblo angustiado. Exhorto a las FAN a brindar garantías inmediatas en Capacho”, posteó.
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