Venezuela consiguió este jueves 17 de octubre una banca en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU para el período 2020-2022, a pesar de las críticas de varias ONG y países latinoamericanos, en una elección organizada por la Asamblea General de Naciones Unidas (ONU).
Venezuela obtuvo 105 votos, en un escrutinio marcado por aplausos cuando se anunció el resultado.
Dos asientos estaban disponibles para América Latina. Brasil ganó el segundo escaño con 153 votos. Costa Rica, que había tratado de bloquear a Venezuela, consiguió solo 96 adhesiones.
El país centroamericano, que había concurrido a los comicios a última hora con el objetivo explícito de impedir que Venezuela se hiciese con un escaño, obtuvo el apoyo de 96 estados miembros, frente a los 105 que respaldaron a la dictadura venezolana, reseñó El Nuevo Herald de Miami.
La elección se produce tras la votación de los 193 estados en la Asamblea General de la organización internacional, que debió decidir por los dos puestos de América Latina y el Caribe.
Brasil, con 153 votos, se llevó la otra plaza disponible para los países de Latinoamérica y el Caribe.
La designación se da en un momento en que Venezuela vive una grave crisis y el gobierno de Nicolás Maduro es rechazado por más de 50 países que reconocen como “presidente interino” al líder del parlamento, Juan Guaidó. Pese a esa circunstancia, hoy fue elegido por mayoría, agrega el reporte del rotativo de Miami.
Críticas a EEUU
Tras conocer los resultados, el canciller de Venezuela, Jorge Arreaza se congratuló por la incorporación del país al organismo internacional.
Al aludir este acontecimiento que brinda un espaldarazo a su gobierno, Arreaza dirigió sus críticas a Estados Unidos y el Grupo de Lima por emprender campañas contra la elección de Venezuela.
Dijo que mostrarán pruebas de las presiones que EEUU ejerció sobre muchos países para obstaculizar la candidatura venezolana.
Consideró “una lástima” que Costa Rica hubiese intentado impedir el ingreso de Caracas al Consejo de DDHH de la ONU.
Unión interparlamentaria
La Unión Interparlamentaria aprobó un informe sobre Venezuela, en el que exige cese del acoso a diputados de la Asamblea Nacional y la liberación inmediata del diputado Juan Requesens, según informó en su cuenta en la red social la diputada a la Asamblea Nacional (AN) por el estado Miranda, Delsa Solórzano.
La parlamentaria indicó que “el Consejo de Gobierno de la UIP141 adoptó una decisión sobre los parlamentarios de Venezuela, expresando preocupación por el aumento de la intimidación de los legisladores de la oposición y pidiendo al gobierno de Nicolás Maduro que garantice que la misión de la UIP aborde las preocupaciones de derechos humanos y ayude a encontrar una solución”, reseña una nota de prensa de la organización difundida este jueves.
La decisión se produce en momentos en que Venezuela logra ingresar en el Consejo de los Derechos Humanos de la ONU.
Por su parte, el diputado Luis Florido, consideró que la silla otorgada a Venezuela en esa instancia de la ONU representa censura, persecución, tortura y asesinato.
“Los violadores de DDHH generan alianzas para alcanzar un espacio en esta instancia de la ONU”, objetó.
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