El encuentro entre Nicolás Maduro y Enrique Iglesias, en el que abordaron aspectos relativos a la ronda de negociaciones que se adelanta en Barbados entre el gobierno y la oposición, vuelve centralizar la atención internacional, en el tema venezolano y su profunda crisis.
Los pronunciamientos de apoyo formulados esta semana por Rusia y China, Panamá, Cuba y, aunque con reservas, por Estados Unidos, sin duda han contribuido a fijar la atención sobre el problemático dilema venezolano.
Maduro recibió este martes en Miraflores al recién designado representante de la Unión Europea y asesor especial para Venezuela, como parte de una agenda acordada entre esa congregación de naciones y el gobierno nacional. A pesar de que se abordaron otros temas, trascendió que el punto central giró en torno al nuevo rumbo que ha tomado el diálogo para superar la crisis del país, con la mediación del Reino de Noruega y el apoyo de la comunidad internacional.
Como se informó con anterioridad, a finales de marzo, el jefe de Estado venezolano, extendió una invitación al representante de la UE para venir Venezuela, a fin de promover el entendimiento y estrechar la relaciones, así como propiciar el camino de la paz.
Este lunes, Iglesias empezó su periplo de encuentros con diversos sectores del país, que incluyeron a la vicepresidente Ejecutiva, Delcy Rodríguez, con el propósito de afianzar la diplomacia de paz y dar continuidad a los mecanismos que faciliten cualquier proceso de negociación para superar la crisis nacional.
Sobre el nuevo ritmo de las negociaciones, el presidente Maduro ha expresado sentirse muy optimista y celebrando que en la agenda de seis puntos se hayan incluido todos los aspectos, aunque no ha especificado cuáles son.
Este miércoles se sumó Cuba a la lista de apoyo, con la declaración del canciller cubano Bruno Rodríguez, quien indicó:
"Apoyamos la iniciativa de diálogo en curso del gobierno de la República Venezuela, basada en los principios del Derecho Internacional y en los postulados de la Proclama de América Latina y el Caribe como Zona de Paz", reseñó El Nuevo Herald.
En un polémico informe al senado de su país, el Almirante Craig Faller, también expresó el apoyo de Estados Unidos, "a los esfuerzos para restaurar la democracia y aliviar el sufrimiento de los venezolanos y la carga de la crisis de la región", pero con la condición, de que "cualquier discusión sobre la transición debe incluir la partida de Maduro", según reseñó AP.
También el integrante del consejo Político del PSUV, William Fariñas, es partidario de que las conversaciones entre el gobierno y oposición "se centren en minimizar la agresión de EEUU hacia Venezuela".
Arreaza: EEUU tiene otra agenda
El gobierno venezolano acusó a Estados Unidos de buscar "destruir" el diálogo con la oposición.
"Ante el estrepitoso fracaso de todas sus modalidades de agresión contra Venezuela, la administración Trump pretende destruir el proceso de diálogo político entre el Gobierno y la oposición", escribió el canciller Jorge Arreaza, integrante del grupo negociador por el Gobierno de Nicolás Maduro.
Arreaza afirmó que el gobierno estadounidense, trata de "imponer su agenda de guerra", reseña AFP.
Agencias de noticias refirieron ayer que un portavoz del Departamento de Estado se pronunció porque "cualquier discusión sobre una transición debe incluir la partida de Maduro como condición previa para las elecciones".
La fuente aseveró que EEUU "apoya todos los esfuerzos para restaurar la democracia y aliviar el sufrimiento de los venezolanos y la carga de la crisis en la región"; pero que excluya a "corruptos y antidemocráticos" en las negociaciones.
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