Enfrentar con mayor eficacia los desafíos del hambre, la desigualdad y la emergencia climática, son las propuestas de Venezuela ante la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), lo cual se traduce en una renovación a fondo de la Organización.

Las solicitudes de Venezuela fueron expuestas en el marco de la 44.ª Conferencia de la FAO, donde el viceministro de Políticas Antibloqueo, William Castillo, denunció las causas estructurales de la inseguridad alimentaria.

“La FAO en sus 80 años no puede ignorar ni mantenerse al margen de esta grave situación”, dijo, al referirse a los crímenes cometidos en Gaza durante la distribución de alimentos.

Castillo también advirtió la profundización de las crisis alimentarias por conflictos armados, colapso de cadenas de suministro y medidas coercitivas unilaterales que restringen el acceso igualitario al comercio internacional.

En este contexto, el gobierno venezolano llamó a impulsar una FAO que promueva la producción soberana de alimentos, la innovación basada en saberes ancestrales, la inclusión de mujeres, pueblos indígenas y comunidades organizadas, y estrategias globales para proteger el ambiente.

Venezuela se une al Grupo de América Latina y el Caribe (Grulac) en las consultas orientadas a reestructurar el funcionamiento del organismo.