Los Estados miembros de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP) rechazan categóricamente la nueva imposición de medidas coercitivas unilaterales por el gobierno de los Estados Unidos a ciudadanos venezolanos.

A menos de dos meses de las elecciones presidenciales en Venezuela, en las que resultó reelecto el Presidente Nicolás Maduro Moros, el gobierno estadounidense no ha parado de agredir a la hermana República Bolivariana de Venezuela en su afán por imponer un cambio de gobierno, en contra de la voluntad del pueblo venezolano.

Hoy, Venezuela amanece con 16 ciudadanos sancionados unilateralmente por el simple hecho de cumplir sus funciones y, básicamente, por ser venezolanos y no actuar en beneficio de un sector político venezolano, que tiene conocidos antecedentes de ser extremista y fascista y que siempre ha vociferado estar a favor del intervencionismo y de la violación al Derecho Internacional, antes que asumir su derrota.

Estas medidas no solo agreden a las 16 personas sancionadas; esta práctica criminal e ilegal del gobierno estadounidense contra los Estados que no actúan en pro de sus intereses, altera la estabilidad económica y política de este país y de la región entera.

El ALBA-TCP repudia contundentemente este nuevo ataque contra los funcionarios públicos, sus derechos humanos y civiles y la nación venezolana en general, que atenta contra la paz y la tranquilidad de toda América Latina y el Caribe y llama a los gobiernos regionales a rechazar estas medidas y a promover la diplomacia y el respeto a la libre determinación de los pueblos.

La Alianza Bolivariana exige respeto de la soberanía de los pueblos libres de Nuestra América y el Caribe, al tiempo que reafirma su apoyo irrestricto y solidaridad con el pueblo y el gobierno de la República Bolivariana de Venezuela".