Barinas.- La sociedad civil, trabajadores de la salud, activistas políticos y vendedores del Mercado Municipal La Carolina de Barinas, ejercieron su derecho a la protesta pacífica para exigir el establecimiento de un salario mínimo que responda a las necesidades de las familias venezolanas.

Víctor Portilla, comerciante barinés, denunció que la falta de respuestas de parte del gobierno a los trabajadores que han ejercido sus reclamos por mejores salarios durante muchos meses, ha estancado el fortalecimiento de los ingresos necesarios para el sustento de un grupo familiar.

Recordó que los médicos, enfermeros, incluso, los trabajadores de la Gobernación y Alcaldía de Barinas, han sido desestimados en sus petitorios obligándolos a buscar actividades extra-laborales, que les permitan obtener algo más de dinero, porque el salario que devengan no les alcanza.

Portilla defendió la posición del empleado y obrero del sector público y denunció que “es el más golpeado de la sociedad venezolana”, por lo que, muchos de éstos han tenido que recurrir a la venta clandestina que “no representa un emprendimiento, sino un vulgar retroceso”.