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Pausado conteo oficial en Perú incrementa la segmentación del país

Un Perú enlutado por la pandemia se adentra a su sexto día de incertidumbre, tras el paulatino conteo de votos que presentará el resultado oficial del balotaje presidencial donde se disputaron Keiko Fujimori y Pedro Castillo

  • NELBRY FRANQUIZ

12/06/2021 12:30 pm

Perú se dividió en dos bandos para la segunda vuelta electoral del pasado domingo 6 de junio, donde el izquierdista por Perú Libre (PL), Pedro Castillo, y la derechista por Fuerza Voluntad (FP), Keiko Fujimori, se disputaron codo a codo el próximo periodo presidencial, 2021–2026.

Para este sábado a las 11:20 am, con el 99,88% de las actas contabilizadas, Castillo mantenía la delantera con 50,14% (8.830.537) de los votos, mientras que Fujimori tenía 49,85% (8.779.599), registrándose una diferencia de 50.938 votos, según los datos de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE).

La candidata derechista se manifestó esta tarde en una reunión con la prensa extranjera insistiendo nuevamente en que hubo "fraude".

"Hay fraude en la mesa, manipulación en mesa", "hay hechos muy graves en esta última etapa" del conteo de votos, afirmó Fujimori.

"Voy a reconocer los resultados, pero hay que esperar el final", prometió, insistiendo en que hubo irregularidades que habrían favorecido a su rival.

El candidato izquierdista se autopresentó ganador el martes por la noche, a pesar de que aún el conteo no ha finalizado oficialmente. Acto seguido empezó a recibir las congratulaciones de los gobernantes de Argentina, Bolivia y Nicaragua.



En las redes sociales comenzó a circular la convocatoria de una manifestación para pedir la intervención del ejército peruano en las elecciones. Dicho en plata, para evitar el ascenso al poder del candidato de izquierdas, según informó El País.

El Ministerio de Defensa, sin embargo, presentó una nota en la que aseguraba que los militares respetarían la constitución, la democracia y el principio de neutralidad asumido por el Gobierno de transición actual.


Por otra parte, este sábado se esperaba el dictamen de al menos 71 actas que fueron impugnadas y enviadas al Jurado Electoral Especial (JNE); el conteo completo del voto en el extranjero, donde la derechista logró mayor apoyo, y las zonas rurales y selváticas donde el izquierdista predomina.

La politóloga Jessica Smith declaró a la AFP que “el resultado es tan ajustado que no lo vamos a saber hasta el último voto”.

Con el fin de calmar la incertidumbre en la población sobre presuntas irregularidades, el JNE de Lima Centro 2 invitó a presenciar vía zoom 20 audiencias públicas sobre votos impugnados, las mismas se llevarían a cabo el miércoles de 2:00 a 5:00 pm.

Agitación social

Al principio se preveía que este balotaje marcaría el fin de la crisis política en el país minero, el cual ha contado con cuatro presidentes en los últimos cinco años. Sin embargo, debido a la actual fragmentación social que atraviesa Perú, con un electorado se dividió en partes iguales entre antifujimoristas y anticomunistas, ya se han generado protestas de los partidarios de ambas partes, los cuales han emitido reclamos por fraude en respectivas ocasiones.

Al cerrarse los centros de votación se dieron a conocer los resultados a boca de urna de la consultora Ipsos, los cuales plasmaron un empate técnico: Fujimori con 50,3% y Castillo con 49,7%. Esto provocó agitaciones en las ciudades de Juliaca, Puno e Ilave, donde los simpatizantes de PL iniciaron movilizaciones de protesta rechazando un presunto fraude electoral contra su candidato.



En Lima otra manifestación se produjo en los exteriores de la sede principal de la ONPE, donde algunos participantes trataban de tumbar la reja levantada por la policía para evitar el paso de la multitud.

Castillo, profesor de 56 años, instó a sus seguidores desde Tacabamba, Chota, a mantener la calma. “Hay que mantener la calma, hay que ser prudentes... el pueblo es sabio, llamo a la más amplia cordura”, expresó el candidato ante simpatizantes.

En el conteo rápido de las 11:30 pm del domingo presentado por la ONPE con 42% de las actas procesadas, Fujimori alcanzaba 52,9% de los votos por encima del 47% obtenido por su contrincante.



El lunes la ventaja se redujo para la hija del encarcelado expresidente Alberto Fujimori y, por primera vez en el escrutinio, Castillo tomó la delantera que mantenía al desarrollarse el proceso.

Al anochecer, Fujimori denunció “una serie de irregularidades e indicios de fraude en la mesa” de votación, pero aseguró que mantenía la fe en que podría remontar el resultado.

“Hay una clara intención de boicotear la voluntad popular”, aseguró la dirigente de FP de 46 años, que mostró un par de vídeos y un par de fotos para avalar su denuncia.

Tras sus declaraciones al menos 200 manifestantes fujimoristas se congregaron la tarde del martes a protestar contra el “fraude” afuera de
la sede central de la ONPE.



Por su parte, PL pidió que la ONPE “cuide la correcta protección de los datos de los votos al procesarlos y publicarlos”.

La misión de observación electoral de la Organización de Estados Americanos reconoció que “el escrutinio se realizó de acuerdo a los procedimientos oficiales” y respaldó el trabajo de la ONPE.

“Estamos pasando por un momento de incertidumbre y expectativas, pero lo que espera el país es que se confirme que los resultados de la votación son aceptados por los candidatos” expresó el analista Hugo Otero a la AFP.

Las dos últimas elecciones en Perú (2011–2016), donde Fujimori también se disputó en segunda vuelta, se caracterizaron por el lento proceso para revelar los resultados oficiales, y en esta ocasión, hasta la fecha de esta nota, el país se adentraba a su sexto día de espera, incrementándose la anhelación de que el proceso culmine este mismo fin de semana.

El Covid-19 es el contrincante final

Culminado el proceso de cómputo, quien resulte candidato electo deberá enfrentar en primera instan- cia la ardua pandemia de Covid-19 que posiciona a Perú como uno de los cinco países con mayor tasa de mortalidad, con 564 decesos por cada 100.000 habi- tantes según AFP, afectando despiadadamente a la economía.

El analista económico peruano Pedro Llanos aseguró que el virus debe controlarse para poder restablecer la economía.

“No hay recuperación económica posible sin un control del virus... Perú ha sincerado recientemente sus cifras de fallecidos por la pandemia, mostrando que ha sido uno de los casos más dramáticos a escala mundial; sin un plan de vacunación sólido el virus va a seguir generando estragos en la economía peruana”, expresó Llanos para El Universal.

El especialista enfatizó que la pandemia ha agravado el deterioro de la calidad de vida de los peruanos.

“La pobreza venía subiendo ligeramente, inclusive antes de la pandemia, simplemente se ha agravado ese deterioro de la calidad de vida; muchas brechas y desigualdades profundas que el Perú venía arrastrando desde hace muchos años también se han evidenciado por el virus, sobre todo en materia de salud”, destacó el analista.

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