El Parlamento canadiense votó este lunes una moción para pedir al Gobierno de Justin Trudeau que incluya a los Proud Boys en la lista de grupos terroristas. Jagmeet Singh, líder del Nuevo Partido Democrático, presentó esta iniciativa que fue apoyada por unanimidad entre los parlamentarios. La moción solicita al Ejecutivo federal que “utilice todas las herramientas disponibles para luchar contra la proliferación de supremacistas blancos y grupos de odio, comenzando con la designación inmediata de Proud Boys como una entidad terrorista”, reseña El País.

Fundado por el canadiense-británico Gavin McInnes en 2016, Proud Boys es un grupo que recomienda el uso de la violencia, solo acepta hombres en sus filas y exhibe una fuerte retórica nacionalista, misógina y antimusulmana. Se describen a sí mismos como “chovinistas occidentales” que sienten hartazgo por pedir disculpas por “crear el mundo moderno”. McInnes abandonó el movimiento en 2018, cuando el FBI comenzó a considerarlo un grupo extremista con lazos con el nacionalismo blanco. Los Proud Boys han generado atención en fechas recientes porque, en el primer debate presidencial en Estados Unidos, Donald Trump se negó a condenar el supremacismo blanco e incluso hizo un guiño a los miembros de esta agrupación al decirles: “Retroceded y quedaos a la espera”. También estuvieron presentes en el asalto al Capitolio de Estados Unidos del pasado 6 de enero. Enrique Tarrio, su líder actual, fue detenido en Washington dos días antes.

Los Proud Boys tienen presencia en Canadá desde su fundación. En julio de 2017, cinco de sus miembros irrumpieron en una manifestación convocada por grupos indígenas en Halifax (Nueva Escocia). El suceso tuvo amplia repercusión porque algunos de los presentes pertenecían al Ejército. Las fuerzas armadas canadienses han señalado que, pese a no tratarse de una “amenaza significativa”, están trabajando para evitar que existan simpatizantes o miembros de estos grupos en sus filas.

Bill Blair, ministro canadiense de Seguridad Pública, declaró el 10 de enero que estaban recopilando información sobre los Proud Boys con el fin de designarlos grupo terrorista. Distintas voces en Canadá se habían dirigido al ministro para pedirle dar el paso a raíz de los eventos en Washington. Tras el voto unánime de los parlamentarios, la oficina de Blair indicó que la decisión de incluir a una organización en la lista de entidades terroristas debe siempre basarse en un proceso de análisis de distintas pruebas a cargo de los servicios de seguridad nacional.

La inclusión de los Proud Boys en la lista de grupos considerados terroristas por Ottawa (donde aparecen Al Qaeda, Boko Haram, Sendero Luminoso, el Estado Islámico, los Tigres de Liberación de Eelam Tamil, entre otros) representaría un mayor monitoreo de sus actividades, sanciones penales contra sus colaboradores, congelación de activos y un incremento de intercambios de información con otros países.

El Gobierno canadiense ha reconocido desde hace años haber descuidado la atención hacia las amenazas de los grupos de extrema derecha por enfocarse principalmente en el yihadismo. Distintas instituciones –como la Red canadiense contra el odio- informan constantemente sobre el proceder de estos colectivos. Tal es el caso de los Soldados de Odín, la Orden Nacional Socialista y la Manada.