Debemos reconstruir de una manera más verde después de la pandemia del Covid-19
Reino Unido como anfitrión de la próxima Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26) a celebrarse en 2021, buscará instar a los países a invertir en una recuperación verde
Por Alok Sharma, presidente de la Cumbre Climática COP26 y ministro de Negocios, Energía y Estrategia Industrial del Reino Unido.
Estamos en un punto de inflexión para nuestro planeta. A medida que nos recuperamos de la pandemia del Covid-19, los gobiernos de todo el mundo están implementando paquetes de estímulo para reactivar sus economías.
Las decisiones que tomemos ahora determinarán si el planeta se reconstruye de una manera más verde y resiliente para las futuras generaciones.
Como anfitriones de la próxima Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26), a celebrarse en noviembre de 2021, queremos incrementar los compromisos mundiales para reducir las emisiones de carbono, instando a todos los países a invertir en una recuperación verde que aborde los desafíos del cambio climático, la
pérdida de biodiversidad y la salud pública.
Desde marzo, el gobierno del Reino Unido ha tomado medidas concretas para construir un futuro sostenible. Y a través de nuestra Presidencia de la COP26, además de la tarea principal de impulsar las negociaciones multilaterales, nos centraremos en tomar medidas en cinco áreas clave.
Debemos mejorar el aire que respiramos promoviendo un transporte más limpio.
La transición hacia un futuro de energía limpia necesita acelerarse.
Es vital que nuestras áreas naturales sean restauradas y protegidas. Estamos invirtiendo 650 millones de libras esterlinas en la protección de hábitats mediante proyectos como la plantación de árboles y la limpieza de ríos, así como en la creación de nuevos espacios verdes para las personas y la vida silvestre.
El mundo necesita ser más resiliente a los impactos de los fenómenos meteorológicos extremos.
Estas cinco áreas son obviamente importantes para la salud de nuestro planeta, pero cada vez resulta más claro que una recuperación verde también tiene un sentido económico.
Y sabemos que la energía eólica o solar son ahora las fuentes más económicas de nueva generación eléctrica para más de dos tercios de la población mundial.
El Reino Unido ha demostrado que el crecimiento verde es posible: desde 1990 nuestra economía ha crecido en un 75%, mientras que hemos reducido las emisiones en un 43%.
Debemos continuar profundizando estos avances, y lo haremos utilizando el Acuerdo de París y los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas como marcos que guíen una recuperación verde.
Exhortamos a otros países a que nos acompañen. Trabajaremos con nuestros socios internacionales para garantizar que estas cinco áreas clave estén integradas en paquetes de recuperación sostenible e inclusiva en las naciones más grandes del mundo.
Juntos podemos aprovechar la oportunidad para reconstruir mejor y de una forma más verde, desarrollando todo el potencial del Acuerdo de París y encaminando al planeta hacia una trayectoria acelerada para cumplir con nuestros compromisos en materia de cambio climático y contribuir a la recuperación económica.
Debemos aprovechar el tiempo antes de la COP26 para unirnos por una economía mundial más justa, más verde y más resiliente, tanto para nuestros pueblos como para nuestro planeta. No tenemos tiempo que perder.
Las decisiones que tomemos ahora determinarán si el planeta se reconstruye de una manera más verde y resiliente para las futuras generaciones.
Como anfitriones de la próxima Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26), a celebrarse en noviembre de 2021, queremos incrementar los compromisos mundiales para reducir las emisiones de carbono, instando a todos los países a invertir en una recuperación verde que aborde los desafíos del cambio climático, la
pérdida de biodiversidad y la salud pública.
Desde marzo, el gobierno del Reino Unido ha tomado medidas concretas para construir un futuro sostenible. Y a través de nuestra Presidencia de la COP26, además de la tarea principal de impulsar las negociaciones multilaterales, nos centraremos en tomar medidas en cinco áreas clave.
Debemos mejorar el aire que respiramos promoviendo un transporte más limpio.
El gobierno de Reino Unido está invirtiendo 2.000 millones de libras esterlinas en crear una nueva era para el desplazamiento en bicicleta y a pie, adquiriendo más de 4.000 nuevos autobuses de cero emisiones y destinando 500 millones de libras esterlinas a nueva infraestructura para vehículos eléctricos.
La transición hacia un futuro de energía limpia necesita acelerarse.
Justo este mes, el ministro de Finanzas del Reino Unido, Rishi Sunak, anunció un paquete de 3.000 millones de libras esterlinas para mejorar la eficiencia energética de hogares, escuelas y hospitales en todo el territorio británico y crear 140.000 empleos verdes.
El esquema planteado para hogares incluye un programa de cupones para aquellos que cuentan con bajos ingresos, de manera que los beneficios de tener un hogar más verde sean incluyentes.
Es vital que nuestras áreas naturales sean restauradas y protegidas. Estamos invirtiendo 650 millones de libras esterlinas en la protección de hábitats mediante proyectos como la plantación de árboles y la limpieza de ríos, así como en la creación de nuevos espacios verdes para las personas y la vida silvestre.
El mundo necesita ser más resiliente a los impactos de los fenómenos meteorológicos extremos.
Reino Unido está invirtiendo más de 5.000 millones de libras esterlinas a nivel nacional para mejorar nuestras defensas contra inundaciones y en las costas.
A través de la Organización de Naciones Unidas (ONU), estamos trabajando simultáneamente con nuestros socios egipcios para liderar una coalición internacional con el objetivo de tomar medidas y mostrar las mejores prácticas de adaptación y resiliencia, asegurando que los más vulnerables estén protegidos de los efectos del cambio climático.
Y uniéndolo todo, debemos aprovechar el poder de nuestros sistemas financieros para fomentar el crecimiento, crear empleos verdes y apoyar proyectos esenciales.
Y uniéndolo todo, debemos aprovechar el poder de nuestros sistemas financieros para fomentar el crecimiento, crear empleos verdes y apoyar proyectos esenciales.
El año pasado, el Reino Unido duplicó su compromiso de financiamiento climático internacional a 11.600 millones de libras esterlinas hacia 2025.
Por ello, invitamos a nuestros socios internacionales a aumentar también su apoyo a los países en vías de desarrollo.
Estas cinco áreas son obviamente importantes para la salud de nuestro planeta, pero cada vez resulta más claro que una recuperación verde también tiene un sentido económico.
La Agencia Internacional de Energía determinó que un billón de dólares de inversión en fuentes de energía renovable en los próximos tres años podría crear nueve millones de empleos verdes.
Y sabemos que la energía eólica o solar son ahora las fuentes más económicas de nueva generación eléctrica para más de dos tercios de la población mundial.
Para 2030, serán más competitivas que la producción existente de carbón y gas en casi todas partes.
El Reino Unido ha demostrado que el crecimiento verde es posible: desde 1990 nuestra economía ha crecido en un 75%, mientras que hemos reducido las emisiones en un 43%.
Debemos continuar profundizando estos avances, y lo haremos utilizando el Acuerdo de París y los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas como marcos que guíen una recuperación verde.
Exhortamos a otros países a que nos acompañen. Trabajaremos con nuestros socios internacionales para garantizar que estas cinco áreas clave estén integradas en paquetes de recuperación sostenible e inclusiva en las naciones más grandes del mundo.
Queremos asegurarnos de que los beneficios de la recuperación verde sean accesibles para los países más vulnerables al cambio climático.
Juntos podemos aprovechar la oportunidad para reconstruir mejor y de una forma más verde, desarrollando todo el potencial del Acuerdo de París y encaminando al planeta hacia una trayectoria acelerada para cumplir con nuestros compromisos en materia de cambio climático y contribuir a la recuperación económica.
Debemos aprovechar el tiempo antes de la COP26 para unirnos por una economía mundial más justa, más verde y más resiliente, tanto para nuestros pueblos como para nuestro planeta. No tenemos tiempo que perder.
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