Bratislava.- La coalición populista en el poder en Eslovaquia lucha por su supervivencia en las elecciones legislativas del sábado, marcadas por el asesinato del periodista Jan Kuciak en 2018 que tuvo un profundo impacto en la vida política del país.

El partido socialdemócrata Smer-SD que lidera al gobierno saliente, corre el riesgo de quedar en el segundo lugar, detrás del partido de oposición de centro derecha, OLaNO, según los sondeos recientes enviados a AFP.

"La gente desea un cambio, y sobre todo una acción contra la corrupción", dijo el analista político Grigorij Meseznikov. El partido Smer-SD "es percibido como responsable de la corrupción", agregó.

El crimen de Kuciak "trastornó toda la escena política, con la aparición de nuevos partidos liberales y democráticos que inmediatamente obtuvieron apoyo popular", destacó Meseznikov, para quien esos partidos de oposición de centro-derecha tienen buenas posibilidades de formar un gobierno.

El asesinato desencadenó protestas masivas que llevaron a la dimisión del primer ministro socialdemócrata Robert Fico y allanaron el camino para la elección a la presidencia eslovaca de la abogada y activista anticorrupción Zuzana Caputova, en marzo pasado.

Mientras su partido OLaNO sube rápidamente en las encuestas, llegando prácticamente al nivel del Smer-SD, su excéntrico líder Igor Matovic, recoge los frutos de la indignación del público del que se hizo portavoz tras el asesinato de Kuciak.

Según las encuestas, el partido de extrema derecha LSNS, popular entre una parte del electorado gracias a sus posiciones contra las élites, podría duplicar el número de sus escaños y obtener 20 escaños en la cámara única, que cuenta con 150.

Un tribunal eslovaco sigue un proceso contra el empresario Marian Kocner, supuestamente el cerebro del crimen, a quien el periodista especializado en casos de corrupción investigaba.

El periodista fue asesinado junto con su novia Martina Kusnirova en febrero de 2018 en un caso calificado de ejecución de tipo mafiosa.