Washington.- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo ayer lunes que las elecciones en Israel, en las que su aliado el primer ministro Benjamin Netanyahu busca mantenerse en el poder, serán reñidas y se definirán por escasa diferencia.
"Gran elección mañana (hoy) en Israel", dijo Trump a los periodistas en la Casa Blanca. "Va a ser cerrada... es una elección 50-50", reseñó AFP.
Las elecciones legislativas de hoy en Israel son las segundas en cinco meses, y significan una instancia decisiva para la supervivencia política del actual primer ministro.
Netanyahu, que con una década ininterrumpida en el poder es el primer ministro que más tiempo ha ocupado el cargo, sufrió una de las mayores derrotas de su carrera luego de las elecciones de abril, cuando no logró formar una coalición a pesar de que su partido Likud, de derecha, y sus aliados consiguieron mayoría parlamentaria.
En lugar de arriesgarse a que el presidente israelí, Reuven Rivlin, eligiese a alguien más para formar gobierno, Netanyahu optó por llamar a una segunda elección.
Las últimas encuestas de opinión publicadas el viernes colocan a Likud y la formación Kahol Lavan ("Azul-blanco", los colores de la bandera israelí), del exjefe del ejército Benny Gantz, en situación de empate.
La semana pasada, Netanyahu prometió anexar gran parte de Cisjordania si gana las elecciones, anuncio que fue alabado por la derecha pero considerado peligroso por sus adversarios políticos.
Las elecciones de hoy, que se asemejan a un "referendo" sobre el futuro del primer ministro israelí, se celebran a solo un mes de la comparecencia de Netanyahu ante la justicia por "corrupción", "abuso de confianza" y "malversación", cargos por los que aún no fue inculpado.
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