Bruselas.- Boris Johnson, el favorito en la carrera por la sucesión de Theresa May, fue corresponsal de prensa británico en Bruselas, antes de regresar como canciller de su país, y no dejó buenos recuerdos a su paso.
En la capital europea, "Boris" es visto como un oportunista que construyó su carrera contando historias tendenciosas sobre la Unión Europea como periodista, antes de mentir a sus votantes como político durante el referéndum del Brexit, indicó AFP.
Entre aquellos que lo frecuentaron a lo largo del tiempo, algunos no excluyen que finalmente sea capaz de cerrar un acuerdo de divorcio con los europeos, a los que critica.
"Existen dos escuelas", dijo Pierre Sellal, antiguo embajador de Francia ante la UE, quien se cruzó con Johnson cuando era corresponsal del Daily Telegraph en Bruselas y ministro después.
"Están aquellos que piensan que el cargo cambia la persona" y que Johnson modificará su comportamiento si se convierte en primer ministro, "y aquellos que consideran... que se comportará como siempre lo hecho", aseguró Sellal.
"Pienso que tendremos una respuesta muy rápido", estimó este antiguo diplomático.
Si como parece probable, Boris Johnson sucede a May en el número 10 de Downing Street, ya prometió que exigirá modificaciones importantes del acuerdo de retirada cerrado entre la primera ministra y la UE en noviembre.
Pero los dirigentes europeos ya han reiterado en los últimos días que se oponen a renegociar el texto, lo que acerca el temido escenario, especialmente en ambientes económicos británicos, de un Brexit sin acuerdo.
"Johnson cree en Johnson"
Pascal Lamy, ex director general de la Organización Mundial del Comercio (OMC) y jefe de gabinete del titular de la Comisión Europea en los años 1990 Jacques Delors, conoce a la familia Johnson desde la infancia bruselense del joven Boris.
El político francés recuerda la pista de tenis de la familia Johnson, que proporcionaba una ventaja a Boris en sus relaciones sociales.
A continuación, se cruzó con el británico en la sala de prensa de la Comisión y siguió su trayectoria política que lo condujo a la alcaldía de Londres y al frente de la diplomacia de su país.
Para Lamy, su apuesta por convertirse en adalid del Brexit responde más a los cálculos de un hombre ambicioso que a convicciones reales.
"No creo que tenga una opinión muy sofisticada del Brexit", asegura Lamy.
"Lo único en lo que cree Boris Johnson es en Boris Johnson".
Si sucede a Theresa May, "una vez llegue al poder, su objetivo será mantenerse", agrega el político francés.
"Una vez que le digan que 'No, lo siento'", el acuerdo de retirada no es renegociable, "lo veo bien volviendo a su país y diciendo: 'Bueno, escuchen, hay que decidir y son ustedes los que tendrán que decidir'".
Otros temen un final diferente.
"Si se comporta inmediatamente de manera agresiva como ha comenzado a hacer exigiendo una renegociación, las cosas irán rápidamente bastante mal", estima Sellal.
Y "el resultado será precipitar un cambio de mentalidad en Bruselas para avanzar hacia la salida, incluso sin acuerdo".
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