El presidente Pedro Pablo Kuczinski se enfrenta a una segunda moción de vacancia tras la acusación de mentir sobre la relación que tuvo con la empresa Odebrecht cuando fue ministro de economía durante el gobierno de Alejandro Toledo.

El Congreso de Perú aprobó este jueves debatir la moción de vacancia (destitución) por permanente incapacidad moral, por sus presuntos vínculos con la empresa brasileña Odebrecht. El pedido de destitución recibió el voto de 87 legisladores a favor, 15 en contra y 15 abstenciones. 

Es la segunda moción en menos de tres meses, luego de sobrevivir el pasado 22 de diciembre a la primera intentona de destitución. La nueva solicitud es impulsada por la minoritaria de izquierda parlamentaria, que había apoyado al mandatario Kuczinski, pero ahora se quiere separar del mandatario y que además cuenta con el respaldo de Fuerza Popular de Keiko Fujimori.

El debate de la vacancia se realizará en un plazo máximo de 10 días y Kuczynski podrá acudir a defenderse en compañía de un abogado, tal como ocurrió en la primera moción de destitución presentada en diciembre último por el mismo caso, indicó Efe. 

La moción responde a las asesorías que Kuczynski ofreció a la constructora Odebrecht por $782.000 entre 2004 y 2007, a través de su empresa Westfield Capital administrada por su socio Gerardo Sepúlveda. 

En esos años, Kuczynski era ministro del Gobierno del expresidente Alejandro Toledo (2001-2006), denunciado a su vez por presuntamente recibir un soborno de 20 millones de dólares de Odebrecht. 

Asimismo, el pedido de los legisladores se basa en las 140 transferencias bancarias en cuentas de Kuczynski que presuntamente lo involucran con Odebrecht, Westfield y First Capital, la consultora de Sepúlveda, según un reporte que el Banco de Crédito del Perú (BCP) entregó a la Fiscalía peruana. 

Asume el vicepresidente

“Para adelantar elecciones tendrían que destituir además a los dos vicepresidentes, puede ocurrir pero en este caso es inviable pues a ningún grupo de oposición le conviene pues todos están en una u otra forma involucrados con Odebrecht y la situación política en el país no está para ese proceso, indicó el analista peruano Fernando Rospigliosi.

Además de salir de la presidencial Kuczinsky tendrá que enfrentar un proceso de investigación y probablemente sea procesado, resaltó Rospigliosi.

Prácticamente toda la clase política peruana está vinculada a los pagos de Odebrecht, resalta el analista; pero aclara que una cosa son los aportes a las campañas electorales y otra es darle dinero a un funcionario público para sacar algún provecho, esto trae consecuencias tanto legales como políticas y es el caso del presidente Kuczinski.

El descredito que están viviendo los políticos en Perú es similar al que vivieron en los años 90, antes de llegar Alberto Fujimori a la presidencia y se corre nuevamente el peligro de caer en manos del populismo de los extremos, ya sea derecha o izquierda.

“A esta altura no hay salida buena, sino que tenemos que buscar una salida menos mala. Si sigue Kuczinski los enfrentamientos con la oposición van persistir con el deterioro económico. Si asume el vicepresidente Martín Vizcarra podría haber una estabilización de la situación política y económica en Perú, no tenemos alternativa”, afirmó Rospigliosi.