Ocho claves del drama migratorio en España
PP y Ciudadanos acusan al PSOE de disparar las llegadas con gestos como recibir en España al "Aquarius", un barco que llevaba días vagando por el Mediterráneo con más de 600 migrantes a bordo
Madrid.- Las imágenes de cientos de migrantes celebrando su ingreso en España tras asaltar una valla fronteriza sacuden a la opinión pública, miles son rescatados del mar cada fin de semana y el drama salta al debate político.
Ocho claves sobre el repunte del drama migratorio en España:
¿Cuál es la situación actual en Europa?
El número de migrantes que buscan entrar en Europa huyendo del hambre y la guerra en países como Siria, Eritrea, Libia, Sudán del Sur o Nigeria viene cayendo de forma sostenida desde 2015, pico de la crisis con 850.000 llegadas solo a Grecia.
Acuerdos de cooperación o deportación -no exentos de polémica- con países de origen como Sudán o Libia, un tratado entre la Unión Europea (UE) y Turquía o una política de fronteras más agresiva de Gobiernos de corte xenófobo como el italiano redujeron ese flujo.
¿Por qué se dispararon las llegadas a España?
Esos mismos motivos hicieron que las mafias buscaran nuevas rutas y se desplazaran hacia el Mediterráneo occidental para explotar el camino marítimo a España, único país en el que las llegadas de migrantes vuelven a crecer y se disparan con la llegada del verano, el mejor momento para cruzar por mar el estrecho de Gibraltar.
¿Cuántos migrantes están entrando en España?
El país superó este año a Italia como primer destino de migrantes. Según cifras oficiales de Madrid, más de 22.200 personas fueron rescatadas del mar este año cuando intentaban llegar a la costa sur del país en embarcaciones precarias, casi la misma cifra que en todo 2017. Solo este fin de semana hubo más de 1.800 rescatados.
Cientos de personas intentan entrar en España también por Ceuta y Melilla, los dos enclaves del país en el norte de África. Más de 600 lo lograron la semana pasada al cruzar la valla fronteriza de Ceuta tras un asalto masivo y violento que dejó varios agentes heridos. Este año rozan los 1.200 en Ceuta y superan los 2.500 en Melilla.
¿Cómo responde el Gobierno español a la crisis?
El fuerte incremento de llegadas puso a prueba la capacidad de los centros de acogida en España, aunque el Gobierno niega que estén desbordados. "Estamos pasando por un pico, pero no por un colapso", señalaron fuentes del Ministerio del Interior.
El Ejecutivo del socialista Pedro Sánchez aprobó de urgencia 30 millones de euros (35 millones de dólares) para mejorar la capacidad de respuesta y abrirá en agosto nuevos centros de acogida en Algeciras y Chiclana de la Frontera. Es "previsible" que se pongan en marcha otros de ese tipo, adelantó una portavoz.
¿Y qué ayuda ofrece la Unión Europea (UE)?
Sánchez envió una carta a la Comisión Europea solicitando ayuda urgente. "Está siendo tramitada y evaluada", confirmó Natasha Bertaud, portavoz del Ejecutivo comunitario.
Bertaud apuntó que Bruselas sigue "muy de cerca" la crisis y que la cumbre de la UE en junio debatió ya formas de intensificar la ayuda a España. Además, la comisión aprobó este mes ayudas por 55 millones de euros a Marruecos y Túnez para que mejoren el control de fronteras y la lucha contra las mafias.
¿Qué impacto social tiene la crisis en España?
A diferencia de lo ocurrido en otros países europeos, la sociedad española parece mantener una actitud comprensiva sobre el drama. Un sondeo de la ONG Oxfam Intermón reveló en junio que un 80% de españoles se muestra preocupado por el aumento del racismo en el mundo y que un 87% considera que los Gobiernos europeos podrían hacer algo más para ayudar a los migrantes.
"Constatamos que la mayoría de españoles dan más importancia a sus valores que a sus miedos", explicó Eva Garzón, experta de Intermón. "La gran mayoría reclama una política de migración mejor y más humana".
¿Y cómo está reaccionando la política?
España carece de partidos de ultraderecha o xenófobos en el Congreso, como ocurre en Alemania o Italia. Sin embargo, imágenes como las del asalto a la valla fronteriza en Ceuta y el goteo de embarcaciones que llegan cada día a la costa llevaron a la oposición a explotar el tema para desgastar al Gobierno.
"No es posible que haya papeles para todos, ni es sostenible un estado de bienestar que pueda absorber a los millones de africanos", avisó Pablo Casado, nuevo líder del conservador Partido Popular (PP). Sin llegar a hablar de "millones", también Albert Rivera, líder del partido liberal Ciudadanos, pidió a Sánchez acabar con el "buenismo".
¿Generó el Gobierno de Sánchez un "efecto llamada"?
La escalada del drama en los medios coincidió con la llegada de Sánchez al Gobierno el 1 de junio tras desbancar a Mariano Rajoy (PP) con una moción de censura. Casado o Rivera acusaron al socialista de disparar las llegadas con gestos como recibir en España al Aquarius, un barco que llevaba días vagando por el Mediterráneo con más de 600 migrantes restados del mar a bordo.
Madrid lo niega de plano y acusa de imprevisión al Gobierno de Rajoy. "Es alarmante, pero era previsible", respondió el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, que viene realizando viajes a países de origen para mejorar la cooperación.
"No hay ningún tipo de efecto llamada", señalaron fuentes del Ministerio del Interior. Las llegadas por mar se habían disparado ya un 270% de 2016 a 2017, recordaron. "A lo sumo hay un efecto huida de los países de donde vienen los inmigrantes. Por eso apostamos por la colaboración con esos países", añadieron.
Fuente: DPA
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