Erfurt, Alemania.- El partido ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD) fracasó hoy en su intento de aprobar una moción de censura contra Bodo Ramelow, jefe de Gobierno del estado federado de Turingia, en el este del país.

Björn Höcke, jefe del grupo parlamentario de la AfD, solo obtuvo el apoyo de sus correligionarios (22 de los 68 votos emitidos) y no alcanzó la mayoría absoluta de 46 votos, necesaria para destituir a Ramelow, del partido La Izquierda, reseñó DPA.

El hemiciclo de Turingia está formado por 90 parlamentarios y el fracaso de Höcke se esperaba de antemano. Según la Constitución de Turingia, una moción de censura constructiva puede ser presentada por una quinta parte de los diputados o por un grupo parlamentario.

Los bloques de La Izquierda, la conservadora Unión Demócrata Cristiana (CDU), el Partido Socialdemócrata Alemán (SPD), Los Verdes y el Partido Liberal (FDP) ya habían declarado públicamente antes del procedimiento que no votarían a Höcke.

Los 21 representantes de la CDU permanecieron sentados y no participaron en la votación, tal como habían anunciado. El líder conservador, Mario Voigt, justificó este paso diciendo que su partido no quería involucrarse en las "artimañas" de los ultraderechistas.

Voigt acusó a la AfD de abusar del Parlamento usándolo como "escenario para un espectáculo" mediante esa moción que no tenía posibilidades de éxito y de "atentar contra el parlamentarismo".

Tras el fracaso de la moción de censura, Ramelow sigue en su puesto, como se esperaba. Desde principios de marzo de 2020 dirige un gobierno minoritario que depende del apoyo de los socialdemócratas y ecologistas al que le faltan cuatro votos para alcanzar la mayoría parlamentaria.

Mediante un acuerdo con la CDU, Ramelow pudo contar con los votos de los conservadores en proyectos importantes durante casi un año y medio.

Sin embargo, los democristianos no quieren renovar este acuerdo, lo cual significa incertidumbre respecto a las mayorías, por ejemplo, para determinar el presupuesto de 2022.

Los líderes regionales de La Izquierda, Los Verdes y de los socialdemócratas planean discutir la cuestión a finales de agosto.