Las autoridades locales han confirmado un muerto y alrededor de 35 rescatados. Medio centenar de residentes no han sido todavía localizados. De las 136 viviendas, cerca de la mitad colapsaron. A la zona han llegado más de 80 dotaciones de bomberos. El gobernador de Florida, Ron DeSantis, ha avanzado que se están preparando “para recibir malas noticias”.

Algunos de los vecinos rescatados del inmueble tras el siniestro han precisado de asistencia médica: 10 fueron atendidos en el lugar y dos, que fueron hallados bajo los escombros, tuvieron que ser trasladados a un hospital, uno de ellos es la víctima mortal. La prioridad ahora es la localización de las personas de las que no se tienen noticias. La comisionada de Miami-Dade —el equivalente a concejal— Sally Heyman ha asegurado en una entrevista en la cadena estadounidense CNN que medio centenar de habitantes del edificio no han respondido a las llamadas ni han contactado con sus familiares.

Pero Heyman ha querido aclarar que eso no quiere decir que estén bajo los cascotes, ya que puede que en el momento del colapso no estuvieran en los pisos al encontrarse de “vacaciones, o por cualquier otra circunstancia”. Y ha añadido: “Así que todavía estamos esperando y la esperanza sigue ahí, pero lamentablemente se está desvaneciendo”. 

La comisionada ha explicado que el número de desaparecidos proviene de la información recopilada por el centro de emergencias que se ha instalado para rastrear la identidad de los afectados y donde los familiares y allegados reciben datos actualizados de la situación. También se ha habilitado una línea telefónica para obtener información u ofrecer datos. Rachel Johnson, jefa de prensa de la alcaldesa del condado, Daniella Levine Cava, ha dicho al Miami Herald que no puede confirmar la cifra exacta de desaparecidos: “No tenemos un recuento oficial”.

Entre las personas que no han sido localizadas se encuentra Sophia López Moreira, hermana de la primera dama paraguaya, Silvana López Moreira, según confirmó el Ministerio de Relaciones Exteriores del país en Twitter. Además, se encuentra en paradero desconocido el esposo de esta, Luis Pettengill, y otros cuatro compatriotas. Lisandro Sabanés, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Argentina, ha asegurado que al menos cuatro ciudadanos de esta nacionalidad que se encontraban en el edificio están desaparecidos, tres de ellos miembros de un mismo hogar, según informa The New York Times.

El suceso ocurrió entre la calle 88 y la avenida Collins, a unos nueve kilómetros de Miami Beach, en un edifico construido en 1981. El área noreste del edificio Champion Towers es la que se ha venido abajo. “El jefe de policía me ha comunicado que al menos dos personas fueron trasladadas al hospital y una de ellas ha muerto; 10 personas han sido atendidas en el lugar”, ha afirmado en el programa matutino Today Show el alcalde de Surfside, Charles W. Burkett.

El gobernador DeSantis ha advertido de que se están preparando “para algunas malas noticias solo por la destrucción que se está viendo”. De momento, se desconocen las causas del derrumbe. “Es difícil imaginar cómo pudo suceder esto”, ha dicho el alcalde Burkett. “Los edificios no se caen sin más”, ha agregado. También ha explicado que 15 familias están siendo reubicadas en hoteles: “No sabemos si el resto de la construcción se va a venir abajo”.

La regidora del condado ha informado de que habló por teléfono con el presidente estadounidense, Joe Biden, quien le ofreció “todo el apoyo del Gobierno federal” para ayudar a la comunidad. “Continuamos trabajando con agencias locales, estatales y federales mientras respondemos a esta tragedia y hacemos todo lo posible para apoyar a las familias afectadas”, ha escrito Levine Cava en su cuenta de Twitter.

Un terremoto

“Desperté a todos en el piso porque cuando miré por la ventana, vi a los vecinos afuera”, dijo Kimberly Morales, una vecina del condominio, a la cadena CNN. “Les dije a todos que se dieran prisa y salieran del edificio”. Morales ha asegurado que no escuchó el derrumbe, pero cuando salió, vio que faltaba una parte significativa de la edificación.

Santos Mejía, esposo de una mujer que quedó atrapada en el piso nueve, donde cuidaba a una persona mayor, ha contado en declaraciones a CNN que recibió una llamada de su esposa en torno a la 1.15 en la que le decía: “Pasó algo terrible, parece que hubo un terremoto y todo está a oscuras”. A lo largo de la madrugada se ha podido comunicar con ella en varias ocasiones. El apartamento seguía sin luz, pero la última vez que hablaron le confirmó que iban a ser evacuadas.