Visitar el recientemente inaugurado paseo de la Cinta Costera ubicado en La Guaira es una excelente opción para el disfrute en familia. El sitio es privilegiado, porque ofrece a los visitantes que transitan el lugar la posibilidad de observar hermosos atardeceres, dejarse envolver por la brisa marina y por supuesto, degustar el sabor original de unas deliciosas paletas. Al más puro estilo de Copacabana, este pintoresco bulevard capta la atención de los cientos de bañistas que pasan por el lugar camino a las playas, y es casi parada obligatoria al momento de regresar. Los más pequeños tienen espacios combinados donde pueden recrearse, siendo una de las principales atracciones, la Aeronave DC3 que fue adaptada para tal fin. 

Caminando se conoce mejor esta tierra. La Cinta Costera es un proyecto que abarca unos 5 kilómetros de vialidad, y aunque no está culminada en su totalidad se puede realizar este trayecto con total normalidad y utilizando sólo sus pies. Además cuenta con vigilancia de los cuerpos policiales de la entidad, las 24 horas. 

 Despeja tu mente y tu respiración

Es necesario alejarse de las situaciones que nos provocan tensión y como consecuencia originan estrés. Si es de las personas que le agrada escaparse durante la semana a un sitio confortable, son recomendables los atardeceres desde Punta de Mulatos. Para sentarse a observar el ocaso y disfrutar de un café no hace falta mucho, tampoco es necesario que se desplace miles de kilómetros, aquí en la Guaira lo puede hacer. La humedad relativa presente en estos ambientes, favorece el despeje de las vías respiratorias. El aire salino que se inspira junto al mar concentra mayor porcentaje de oxígeno y yodo que el de las ciudades, y esto puede aprovecharlo mejor nuestro cuerpo.

Paletas que derriten 

Hasta los momentos son tres las franquicias que ofrecen una alternativa para tener acceso a una merienda en el paseo de la Cinta Costera, pero el clima húmedo y cálido hace que buena parte de los visitantes elijan las "Paletas" como la mejor opción. La sensación agradable del frío en el paladar combinado con sabores tan tradicionales como: la susy, el toronto y la samba no tienen comparación. Sin embargo la variedad no culmina allí, y es que para los gustos más exigentes y aquellos que buscan menos calorías también hay opciones. 

Estamos a tiempo 

En recientes visitas a la playa, en especial a La Guaira, se ha observado que tanto adultos como niños arrojan desperdicios a las postrimerías de la playa; excusas como "no hay muchas papeleras" "los niños no sabían" o "se cayó sin querer" son sólo muestras de que nos falta mucho por aprender. Un envase de plástico puede durar cientos de años para degradarse, ahora imagine que 200 personas arrojen el mismo material. Los entes gubernamentales, las asociaciones vecinales, comunales y empresa privada deben unirse con el fin de adoptar medidas que frenen este comportamiento. Mantener limpio un sitio de interés turístico como éste es tarea de todos. Si es posible en otros países de América Latina también es posible en Venezuela.