En cualquier paseo por Manchester, si hay una visita inesperada y asombrosa esa es la de su histórica biblioteca que lleva el nombre de John Rylands Library, un regalo de Enriqueta Rylands a la ciudad en 1899. Al pisar las salas de esta construcción neogótica, el visitante tiene la sensación de encontrarse en una catedral repleta de libros, mapas, manuscritos y documentos históricos. Entre esos tesoros destacan una Biblia de Gutenberg fechada en 1455, una colección de más de mil papiros egipcios, árabes y coptos y uno de los libros más grandes del mundo sobre las aves de América. La pieza mide un metro de altura y se imprimió en 1830. 

En Castlefield, en la antigua zona industrial de Manchester, se sitúan los orígenes romanos de la ciudad. Mamucium, la primera fortificación romana, se levantó en este lugar repleto hoy de canales y puentes que se llena de gente en verano para tomar el sol o para viajar en barco hasta Liverpool, aunque en el camino a la ciudad de Los Beatles conviene saber que hay que superar cinco esclusas y otras cinco horas de navegación. En este punto, siempre reconocible al desplegarse por los alrededores del Beetham Tower, el rascacielos más alto en Manchester, se entremezclan también las vías ferroviarias que fueron utilizadas en 1830 por el primer tren de pasajeros del mundo uniendo las dos ciudades más famosas de este rincón del norte inglés. Esta locomotora a vapor se exhibe en el Museo de la Ciencia y la Industria junto a las máquinas textiles de algodón que convirtieron a Manchester en una potencia económica durante la Revolución Industrial. 

Manchester cuenta con la segunda comunidad china más grande de Inglaterra. Los primeros locales abrieron en Chinatown tras la II Guerra Mundial y en los años sesenta del siglo XX se produjo la primera oleada de inmigrantes que ocupó este barrio. En la actualidad, en estas calles, presididas por un arco auténtico de la China imperial, hay escuelas, tiendas, restaurantes, centros médicos y panaderías regentadas por una amplia población oriental que celebra todos los años en febrero el Festival de Año Nuevo Chino. 

Desde la terraza del restaurante 20 Stories, en el distrito de Spinningfields, se disfruta la mejor vista de Manchester en la que sobresale la silueta del Ayuntamiento, un grandioso edificio neogótico victoriano de 1877 que hoy se encuentra en obras. Para alcanzar este punto hay que subir a la planta 19 en un ascensor instalado en el número 1 de Hardman Square. Arriba, puedes disfrutar de una terraza que simula un jardín botánico y de una propuesta gastronómica dirigida por el chef Aiden Byrne, premiado con una estrella Michelin. 

En verano, locales y turistas tienen una cita en el Festival Internacional de Manchester. Este certamen se celebra cada dos años y está considerado el más importante de los que se organizan en Inglaterra por sus eventos de música, cine, teatro, danz. Este año se desarrollará del 4 al 21 de julio con artistas de más de 20 países entre los que destacan Yoko Ono, David Lynch o Idris Elba. 

Fuente:elmundoalinstante.com