Pablo Ortega
En febrero, la cascada Horsetail (Cola de Caballo) se lanza al vacío mostrando unos vivos colores anaranjados y parece lava durante unos instantes. Este momento único ocurre solo en la puesta de sol, momento en el que las entrañas de Yosemite parecen abrirse y expulsar fuego.
Las fotos son increíbles, pero vivir este espectáculo de la naturaleza en persona es una experiencia indescriptible. Así lo asegura James Kaiser, un fotógrafo que decidió retratar la llamada cascada de Fuego (Firefall ) cuando todavía no se había dado a conocer por las redes.
“Decidí fotografiar el fenómeno porque no podía creer las fotos que había visto en los libros. ¿Cómo podía ser real una cascada que adopta colores rojos y anaranjados?”, nos cuenta este experto. “Llegué a pensar que las fotos habían sido manipuladas, pero resultó no ser así. De hecho, es mucho más espectacular vivirlo en persona”.
Horsetail Falls es una de las cascadas más humildes de Yosemite, sin embargo, durante la segunda quincena de febrero, varios factores naturales consiguen convertirla en toda una celebridad internacional. ¿Por qué?
La primera de las razones se debe a la posición del sol. “El sol sale a su posición entre mediados y finales de febrero de cada año, por lo que, si estás en el lugar correcto, ahí es cuando sucederá la magia”, explican en la página oficial del parque.
El segundo requisito es que haya suficiente agua en la cascada. “Para lograr un buen flujo en Horsetail Fall deben suceder algunas cosas diferentes. Primero, tiene que haber algo de nieve. En segundo lugar, debe hacer suficiente calor durante el día para que el sol derrita la nieve y la haga correr por el borde de la caída. Si hace frío, el acantilado que rodea la cascada seguirá iluminado y el hilo de agua que cae por el borde reflejará el sol poniente, pero no verás la corriente de fuego fundido a menos que haya más agua”.
Con el sol en el lugar correcto y suficiente agua en Horsetail Fall para captar el sol, la cascada de fuego puede aún no materializarse si las nubes bloquean el sol durante los minutos críticos de la tarde. Por esa razón, un pronóstico nublado alejará a muchas personas.
“Sin embargo, si ese pronóstico nublado se aclara lo suficiente como para dejar pasar el rayo de luz solar correcto, puedes terminar con una imagen única con el Firefall rodeado de brillantes nubes rosadas”, añaden.
Cuándo y cómo ver la cascada
La naturaleza no es una ciencia exacta, pero los cálculos dicen que se podrá ver durante la segunda quincena de febrero. El momento mágico ocurre entre cinco y 15 minutos antes del atardecer.
Fuente: Condé Nast Traveler
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