Herederos de la tradición caraqueña de celebrar fechas importantes con sabrosos helados los hermanos Pedro y Ramón Dahdah, al frente de Fragolate Heladería Artesanal, se han aliado con Herencia Divina Chocolatería y Cacao Santa Clara para festejar, de una forma muy especial, los 452 años de la fundación de Caracas.
El resultado son cuatro sorbetes, es decir elaborados sin añadido de lácteos o materia grasa, que quieren mostrar al consumidor todas las características organolépticas de cada una de las cuatro barras seleccionadas.
Los dos sorbetes elaborados con el producto de Chocolatería Herencia Divina son un homenaje a Belén Palacios cacaotera reconocida como la “reina del quitiplás” en su Barlovento natal.
Fue nombrada patrimonio cultural de Miranda y a partir de sus 60 años viajó por casi 30 países mostrando el sonido de ese instrumento que ella misma elaboraba. En Tapipa, donde hizo vida hasta su muerte en 2009, tenía una hacienda de cacao, preparaba dulcería criolla y mostraba las destrezas con este instrumento hecho de bambú.
Miguel Rodríguez y Omar Ramones de Chocolatería Herencia Divina conocieron su historia en Barlovento. Y para honrarla, Rodríguez decidió crear una tableta en homenaje a Palacios, como parte de su línea Herederos del cacao, creada en honor a personajes que han dedicado su vida al cacao del país.
Es una barra de chocolate y maiz con 63% de cacao Barlovento. Está rellena de toffee de caramelo y coco. ¨Lleva maíz porque es parte de lo que ella tenía sembrado en el conuco de su hacienda.
Ernesto Uranga, de Cacao Santa Clara, es un ingeniero mecánico entregado a la elaboración de chocolates desde el grano hasta la tableta.
En esta oportunidad su tableta Torres Choroní, hace un doble homenaje a la tierra donde sus abuelos tenían su casa y donde vivió sus vacaciones infantiles.
La segunda tableta de cacao Santa Clara incorporado en forma de sorbete a esta selecta colección de Fragolate Helados es de origen Cepe, descubierta por Uranga en su exploración por las costas de Aragua a 15 minutos en peñero desde Choroní, esta zona formaba parte de la hacienda Chuao original, y el productor es Vidal Díaz, según los estudios del chocolatero es muy probable que la genética de este origen sea similar al que dio fama al cacao venezolano en tiempos de la colonia.
Los sorbetes están disponibles desde el 24 de julio, hasta agotarse la existencia.
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