Aunque no la parezca, el modo en que se disponen los alimentos en la nevera incide en su conservación. Dependiendo de cómo se coloquen en el refrigerador, durarán un poco más.
Los alimentos se conservan a diferentes grados de temperatura. Por lo tanto, elegir el compartimiento correcto es decisivo para mantenerlos frescos por más tiempo.
Sin embargo, también el tipo de refrigerador juega un papel importante, según apunta Initiative Hausgeräte +, una empresa alemana que informa sobre el uso correcto y más eficiente de los electrodomésticos.
En las neveras convencionales con refrigeración estática, el aire frío desciende y el calor sube. Las áreas más cálidas dentro del gabinete son el estante superior y los compartimientos de la puerta. Estos son ideales para guardar las mermeladas, los aderezos abiertos, la mantequilla y los productos de pastelería.
En el centro de la nevera deberían tener su lugar los productos lácteos, los huevos y los alimentos ya cocinados, debido a que el frío cala más en ese lugar, donde los productos que ahí se dispongan necesitan conservarse un tiempo más.
El estante de vidrio en la parte inferior es el sector más frío del refrigerador. Allí conviene almacenar los alimentos perecederos como la carne, las salchichas y el pescado.
En tanto, en los cajones debajo de este estante la temperatura es nuevamente más templada porque el vidrio retiene el frío. Este compartimiento es ideal para frutas, verduras y hierbas, reseñó DPA.
En los refrigeradores modernos un ventilador asegura la misma temperatura y humedad en todo el interior del aparato doméstico, de manera que los consumidores pueden almacenar sus alimentos en cualquier lugar del electrodoméstico.
Mayormente estas neveras poseen zonas de cero grados, divididos en un compartimento "seco" para carne o queso con 50% de humedad y otro "húmedo" para verduras y lechuga con aproximadamente 90% de humedad.
Sin embargo, es deber del ama de casa o quien use la nevera el estar pendiente de la temperatura de la misma. Si la temperatura cambia o se rompe la cadena de frío, es posible que surjan microbios. Expertos señalan que la temperatura de la misma no debe superar los 4 grados centígrados. En el caso de las verduras, las frutas y las hortalizas, la temperatura no debe bajar de 0 grados.
Asimismo señalan que no es recomendable meter alimentos calientes en el electrodoméstico, ya que esto aumenta el consumo de energía debido a que necesita más potencia para mantener la temperatura.
Y por último, haya o no apagones es recomendable usar un protector de voltaje.
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